Vista En: AXN, lunes 25 de junio de 2001.
Título Original: Last Action Hero.
Director: John McTiernan.
Guión: Shane Black y David Arnott, basado en una
historia original de Zak Penn y Adam Leff. Género: Acción.
Música: Michael Kamen. Fotografía: Dean Semler.
Decorados: Cindy Carr. Vestuario: Gloria Gresham.
Productoras: Columbia Pictures Corporation y Oak
Productions.
Presupuesto: ±85.000.000 $.
País: USA. Año: 1993. Duración: 130 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Arnold Schwarzenegger
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Jack Slater/Arnold Schwarzenegger
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Austin O’Brien
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Danny Madigan
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F. Murray Abraham
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John Práctica
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Art Carney
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Frank
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Charles Dance
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Benedict
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Frank McRae
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Teniente Dekker
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Tom Noonan
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El Carnicero/Tommy Noonan
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Robert Prosky
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Nick
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Anthony Quinn
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Tony Vivaldi
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Mercedes Ruehl
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Irene Madigan
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Ian McKellen
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La Muerte
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Profesor Toru Tanaka
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Rudo hombre asiático
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Danny Madigan es un joven adicto a las
películas de su héroe de acción, Jack Slater. Debido a una entrada mágica que
le da su amigo Nick que había pertenecido a Houdini, Danny acaba metido dentro
de la película que está viendo, formando dúo con el propio Slater, al que
intenta convencer de que en realidad él y todo los demás solo son personajes de
ficción.
Crítica: Trepidante mezcla de comedia con acción con
el que el director de Jungla de Cristal [1988] y La Caza del Octubre Rojo
[1990] juega a desmontar los mitos de las películas gracias a un Arnold
Schwarzenegger pasándoselo en grande a base de sobreactuaciones y dobles
papeles, acompañado de un 50% cómico 50% cargante Austin O’Brien, con cameos
fugaces pero que se antojan inolvidables, y el que tal vez sea el mejor chiste
sobre cine jamás hecho (la referencia a Terminator 2: El Juicio Final [James
Cameron, 1991] por parte de Slater: para rebobinar compulsivamente; Robert
Patrick y Sharon Stone, apareciendo uno detrás de otro para repitiendo por
segundos a su T-1000 y a Catherine Tramell; Danny, intentando enfrentarse a un
coche...montado en bicicleta, algo no por azar que en apenas segundos se
permite un guiño a una obra maestra de Steven Spielberg). Luciendo hilarante
por la elección de sus villanos y con la locura por bandera, El Último Gran Héroe
es una gigantesca broma sobre la Meca del Cine con un defecto rarísimo en su
contenido, pero un acabado más que estupendo para soltar adrenalina por un tubo
(la voz en español de Arnold, ortopédica al infinito; Anthony Quinn y Charles
Dance, el primero sobreactuado de necesidad y el segundo mucho más contenido y
por eso fenomenal: lo de los perros no es tan genial como su “comprobación”
tras ver como liquidan a un hombre por unos zapatos; F. Murray Abraham, en otro
de esos papeles puro estereotipo: ¿cómo el malísimo y maravilloso Salieri de
Amadeus [Milos Forman, 1984] se ha extraviado de ese modo?). Un film ideal para
ver entre colegas al que es imposible tomárselo en serio incluso cuando lo
pretende (Slater llegando a casa, o su queja a Danny sobre lo que ha sido su
vida), y que cumple sobradamente sus objetivos como entretenimiento. Y lo de la
persecución en coche con caída de un puente...antológico.
La Puntilla: “A-B-C de los clichés de cine y como
reventarlos”. Y lo demás, a partirse de risa hasta el dolor de estómago que de
eso va la cosa.
Mi
Valoración
★★★★★
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