Vista En: Cines Marta & María (Avilés), sábado 20
de octubre de 2001.
Título Original: Le Pacte des Loups.
Director: Christophe Gans.
Guión: Stéphane Cabel. Género: Intriga.
Música: Joseph LoDuca. Fotografía: Dan Laustsen.
Decorados: Jacques Aucomte, Denis Bourgier y Catherine
Jarrier-Prieur. Vestuario: Dominique Borg.
Productoras: Canal+, Davis-Films, Natexis Banques
Populaires Images, Studio Image Soficas, Eskwad y TF1 Films Production.
Presupuesto: ±200.000.000 ₣ (±30.000.000 €/±29.000.000 $).
País: Francia. Año: 2001. Duración: 142 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Jacques Perrin
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Thomas d’Apcher de viejo/Narrador
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Samuel Le
Bihan
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Grégoire de Fronsac
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Vincent
Cassel
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Jean-François de Morangias
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Émilie
Dequenne
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Marianne de Morangias
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Monica
Bellucci
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Sylvia
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Jérémie
Reñiré
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Marqués Thomas d’Apcher
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Mark
Damascos
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Mani
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Jean Yanne
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Conde de Morangias
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Jean-François Stévenin
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Padre Henri Sardis
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Édith Scob
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Condesa Geneviève de Morangias
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Johan
Leysen
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Antoine de Beauterne
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Bernard Farsi
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Intendente
Pièrre-Jean Laffont
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: En 1766, Grégoire de Fronsac es un médico
dentro del Palacio de Versalles que es enviado a la remota región de Guevaudán,
para investigar varios asesinatos por parte de lo que según los informes es una
bestia asesina que merodea por tal lugar. Viajando con Mani, un guerrero nativo
americano, los dos intentan descubrir si la supuesta bestia es real o solo un
mito.
Crítica: Seis años más tarde de su debut como director
adaptando el célebre cómic japonés Crying Freeman: Los Paraísos Perdidos
[1995], Christophe Gans recrea con todo lujo de detalles uno de los sucesos más
misteriosos ocurridos en la Francia del rey Luís XV, sacando buenas migas de su
ambientación como de la pareja protagonista, unos insólitos compañeros de
circunstancia que de pronto se ven envueltos en un asunto más insidioso de lo
que parece a simple vista (el diseño de la criatura así como el de su amo, en
que no se sabe cual de los dos es más terrorífico; Guevaudán, una campiña
francesa marcada por el horror como por lo agreste de un paisaje que se antoja
perturbador; Mark Damascos, ofreciendo la que tal vez sea la mejor
interpretación de su carrera en la piel de Mani, un guerrero nativo americano:
tanto su actitud como sus miradas matizan a un hombre extraño en una tierna aún
más extraña). De un poderoso y evocador trabajo en la banda sonora como
exquisito en todos los trajes del vestuario, El Pacto de los Lobos es una
intriga bien ambientada y mejor ejecutada, agradecida en un par de detalles
como impecable en otros, que refuerza posiciones para erigirse como una versión
muy personal de unos eventos reales nunca explicados satisfactoriamente
(Sylvia, una prostituta un tanto especial encarnada por una sensual y
arrebatadora Monica Bellucci: no hay momento suyo donde no robe miradas y
corazones; la cara de Fronsac al ver a la supuesta criatura capturada: su
perplejidad demuestra las dudas de un hombre incapaz de aceptar lo que le
cuentan; Vincent Cassel, otro puntal de lanza en la película, espléndido de
principio a fin). Un largometraje de lo más entretenido y suculento, donde las
apariencias son sumamente engañosas y las bestias no siempre van a cuatro patas
(cierta reunión interrumpida por Mani). Un trabajo encomiable, que no flaquea
ni tampoco decepciona.
La Puntilla: El que crea que Hollywood es el único que
sabe hacer cine, que se lo piense dos veces. Y hasta tres si fuese necesario.
Mi
Valoración
★★★★★
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