Vista En: Cines Marta & María (Avilés), viernes 28
de marzo de 2003.
Título Original: The Core.
Director: Jon Amiel.
Guión: Cooper Layne y John Rogers. Género: Acción.
Música: Christopher Young. Fotografía: John Lindley.
Decorados: Lin MacDonald. Vestuario: Daniel J. Lester.
Productoras: Paramount Pictures, Horsepower Films,
LivePlanet, Munich Film Partners New Century & Company Core Productions,
Core Productions y David Foster Productions. Presupuesto: ±60.000.000 $.
País: USA, Alemania, Canadá y Reino Unido. Año: 2003. Duración: 135 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Aaron Eckhart
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Dr. Joshua ‘Josh’ Keyes
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Hilary Swank
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Mayor Rebecca ‘Beck’ Childs
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Delroy Lindo
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Dr. Edward ‘Braz’ Brazzelton
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Stanley Tucci
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Dr. Conrad Zimsky
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Tchéky Karyo
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Dr. Serge Leveque
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Bruce Greenwood
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Comandante Robert ‘Bob’ Iverson
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DJ Qualls
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Theodore Donald ‘Rat’ Finch
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Alfre Woodard
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Dra. Talma ‘Stick’ Stickley
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Richard Jenkins
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Teniente General Thomas Purcell
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Christopher Shyer
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Dave Perry
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Ray Galletti
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Paul
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Eileen Pedde
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Lynne
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Debido a que el núcleo terrestre ha dejado de
girar, la Tierra se verá dentro de poco tiempo son su protección
electromagnética que recubre la atmósfera y la protege del sol. Intentando
evitarlo, un equipo del ejército crea un vehículo especial capaz de llegar
hasta el interior del núcleo, en una jugada desesperada para salvar a la raza
humana de morir abrasada.
Crítica: El director de Sommersby [1993] y La Trampa
[1999] hace un cambio de género para realizar una aventura que busca rescatar
el cine catastrofista pero cruzado con la ciencia ficción más inverosímil,
dejando algunos detalles que rechinan y otros que directamente no hay forma de
creerse, pero que se sirven para llevar su guión por los tan manidos derroteros
del género, dado un comienzo misterioso y algunas secuencias en donde los
efectos especiales son los que realmente importan (las secuelas de la parada
del núcleo, primero en Roma y luego en San Francisco, impresionantes y angustiosas
por igual; Keyes y Zimsky, explicando cuál es exactamente el problema, con
Stanley Tucci en otro papel hecho para robar escenas y diálogos a base de
ironía: su pose a lo Carl Sagan es divertidísima; el inicio, con una reunión de
una empresa que no acaba bien y una plaza pública donde llueven pájaros en vez
de agua). Bien traída en lo tocante a su elenco principal, a pesar de que a
veces se note una cierta falta de química entre ellos, secundarios como Richard
Jenkins y Alfre Woodard aportan su granito de arena para otorgarle cierta
entidad y sacarla de la medianía (la definición del Inoptanio hecha por Braz:
una imposibilidad científica que contradice las leyes sobre ese tema concreto;
Rata, divertido DJ Qualls, y su manejo de la red para evitar que el público
sepa lo que está pasando: ¿en serio una sola persona puede controlar TODO el
flujo de datos e información de Internet?; el Virgilio, una alegoría sobre la
penetración fálica llevada hasta extremos ridículos: lo de la cueva de piedras
preciosas es una de esas secuencias impresionantes y peligrosas que también se
hace difícil de creerlas). Alocada y plagada de inexactidudes, El Núcleo se
deja ver como un film 100% desmelenado con el que, partiendo de premisas
absurdas, abordar dos horas de entretenimiento. A costa de la destrucción de la
Tierra.
La Puntilla: ¿Un metal que cuanto más se calienta más duro
y resistente se vuelve?. ¡Sí, claro!. ¡Y en el amanecer salen dos soles, no te
jode!.
Mi
Valoración
★★★★★
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