Vista En: Youtube, lunes 13 de marzo de 2017.
Título Original: Electroshock.
Directores: Pascal Chandelier, Hugo Jackson, Elliot Maren,
Valentin Michel y Bastien Mortelecque.
Guión: Pascal Chandelier, Hugo Jackson, Elliot
Maren, Valentin Michel y Bastien Mortelecque. Género: Animación.
Música: Thierry Jaoul. Dirección Artística: [Desconocido].
Productora: Ecole Supérieure des Métiers Artistiques.
Presupuesto: [Desconocido].
País: Francia. Año: 2011. Duración: 8 minutos. Color.
Voces Originales:
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Personajes:
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Christophe Lemoine
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Buck
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Ariane Aggiage
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Mady
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Michel Vigné
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Sheriff
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Laetitia Lefebvre
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Niky
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Véronique Augereau
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Abuela
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Philippe Peythieu
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Todos los personajes de fondo
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: En el pequeño pueblo del Cactus Groove,
Estados Unidos, donde nunca pasa nada, Buck es un electricista enamorado de Mady,
la camarera del bar. Cuando reparando unos cables consigue el superpoder de
congelar el tiempo, se convierte en Electroshock para impresionar a Mady. Pero
cada una de sus apariciones como superhéroe saldrá peor que la anterior.
Crítica: Hilarante y bien pensaba parodia del mundo de
los superhéroes que es ambientada muy adecuadamente en el clásico pueblo de
mala muerte en mitad del desierto del país de las barras y estrellas, en una
mezcla acertada entre el Hal Stewart de Megamind [Tom McGrath, 2010] y el
Síndrome de Los Increíbles [Brad Bird, 2004] para dar vida al clásico soñador
que suspira por la chica más guapa del pueblo, cuyo rival le gana por goleada
(el inicio, donde los personajes son presentados en apenas un fugaz suspiro,
demostrando que Buck está en clara desventaja sobre el petulante y pagado de si
mismo sheriff del pueblo; el diseño del traje de Buck así como su pelo de punta
cuando es superhéroe, de clara inspiración en la película de Bird; la delirante
escena en que la película pasa de la animación por ordenador a la tradicional
2D, en un resumen muy básico del desastre que una sola persona puede llegar a
causar partiendo de las mejores intenciones). Metiendo una banda sonora que va
a juego con el lugar y una puesta en escena pequeña y colorista, Chandelier y
sus compañeros y estudiantes por la universidad francesa de la ESMA {Ecole
Supérieure des Métiers Artistiques} se montan una jugosa revisión de lo que
supone ser un superhéroe para demostrar que a veces hace falta más que un traje
mover montañas para salvar el día (Electroshock, intentando salvar a un
ciudadano de un atraco, solo para recibir de todo menos un “gracias”; Mady,
corriendo al lado de Buck, que aparte de un poco sexista deja una duda en el
aire: ¿hasta cuando habrá que seguir viendo a mujeres con unas cinturas más
pequeñas que su cabeza?; el instante en el bar, con Buck pensado que lo ha
hecho bien...pero nada más lejos de la realidad). Un trabajo resuelto, simple y
de lo más cómico. Aunque nada tan ídem como su escena final. Otra prueba de que
ser héroe nada tiene que ver con llevar trajes chillones.
La Puntilla: «La capacidad de hablar no te hace
inteligente», decía Qui-Gon Jinn. “Tener superpoderes no te hace superhéroe”,
digo yo.
Mi
Valoración
★★★★★
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