Vista En: Antena 3, jueves 7 de febrero de 2014.
Título Original: The Shawshank Redemption.
Director: Frank Darabont.
Guión: Frank Darabont, basado en la novela Rita
Hayworth y la Redención De Shawshank, de Stephen King, publicada en 1982. Género: Drama.
Música: Thomas Newman. Fotografía: Roger Deakins.
Decorados: Michael Sierton. Vestuario: Elizabeth McBride.
Productora: Castle Rock Entertainment. Presupuesto: ±25.000.000 $.
País: USA. Año: 1994. Duración: 142 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Tim Robbins
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Andy Dufresne
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Morgan Freeman
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Ellis Boyd ‘Red’ Redding
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Bob Gunton
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Alcaide Samuel Norton
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William Sadler
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Heywood
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Clancy Brown
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Capitán Byron Hadley
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Gil Bellows
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Tommy Williams
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Mark Rolston
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Bogs Diamond
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James Whitmore
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Brooks Hatlen
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Jeffrey DeMunn
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1946 D.A.
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Larry Brandenburg
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Skeet
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Neil Giuntoli
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Jigger
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Brian Libby
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Floyd
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Andy Dufresne es un vicepresidente de banca
al que condenan a dos cadenas perpetuas por el asesinato de su esposa y de su
amante, a pesar de ser inocente. A la vez que intenta obtener la libertad desde
prisión, otro recluso, Red, le instruye para sobrevivir en la cárcel,
convirtiéndose de modo paulatino en la mano derecha del alcaide Norton en sus
asuntos sucios.
Crítica: Debut como director de Frank Darabont,
después de la película para TV Enterrado Vivo [1990], tomando como base el
trabajo de King para hacer de él un largometraje prodigioso en todos los
aspectos, empezando por unas interpretaciones poderosísimas y una ambientación
sin mácula, y terminando por una fotografía y una puesta en escena que
transporta al espectador a los años 40 y 50 de forma admirable (Dufresne,
usando su ingenio para evitar ser víctima de abuso carcelario; Clancy Brown,
sádico y despiadado, el villano a odiar hasta por encima del Kurgan de Los
Inmortales [Russell Mulcahy, 1986]; Red, comentando sobre estar
‘institucionalizado’: tal vez y con diferencia la mejor explicación de lo que
es estar en prisión que se haya hecho nunca). Un retrato en crudo sobre la
injusticia y la hipocresía, enfrentado al espíritu de un hombre inquebrantable
en un duelo cocido a fuego lento y preparado con la maestría de un chef cinco
tenedores (Norton, un alcaide dispuesto a sacar su sueldo extra gracias a sus
reclusos; los esfuerzos de Dufresne por darle una educación y una biblioteca
decente para él y los demás reclusos; el instante en el que Dufresne le explica
a Red la forma de crear a alguien que en verdad no existe, tan bien detallado
que parece 100% real: Morgan Freeman está de un inmenso difícil de
cuantificar). Guardándose algún que otro momento de puro suspense y otros tan
desgarradores que hacen salir toda la melancolía y tristeza del mundo (Hadley,
a punto de arrojar a Dufresne desde lo alto de la cárcel; una celda,
inexplicablemente vacía; el destino final de Brooks, genial y terrible a la
vez), Cadena Perpetua es una superproducción sin miramientos ni medias tintas,
una película repleta de matices que avanza de un modo más perfecto, y cuyo
compás y epílogo marcan un inmejorable broche de oro para uno de esos títulos
tan vibrantes como su protagonista. Robbins ES la peli.
La Puntilla: El sistema te encarcela y te exilia entre
delincuentes. ¿Se podría conservar la esperanza en la justicia después de algo
así?.
Mi
Valoración
★★★★★
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