Vista En: Cuatro, martes 24 de mayo de 2017.
Título Original: Pirates of the Caribbean: On Stranger Tides.
Director: Rob Marshall.
Guión: Ted Elliott y Terry Rossio. Género: Aventuras.
Música: Hans Zimmer. Fotografía: Dariusz Wolski.
Decorados: Gordon Sim. Vestuario: Massimiliano Amicucci y Penny Rose.
Productoras: Walt Disney Pictures, Jerry Bruckheimer Films
y Moving Picture Company. Presupuesto: ±378.000.000 $.
Países: USA y Reino Unido. Año: 2011. Duración: 136 minutos. Color.
Reparto:
|
Personajes:
|
Johnny Depp
|
Jack Sparrow
|
Penélope Cruz
|
Angelica Teach
|
Geoffrey Rush
|
Héctor Barbossa
|
Ian McShane
|
Edward Teach ‘Barbanegra’
|
Kevin McNally
|
Joshamme Gibbs
|
Sam Claflin
|
Philip Swift
|
Astrid Bergès-Frisbey
|
Sirenia
|
Stephen Graham
|
Scrum
|
Greg Ellis
|
Theodore Groves
|
Damian O’Hare
|
Gillette
|
Óscar Jaenada
|
El Español
|
Gemma Ward
|
Tamara
|
(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Buscando un barco con el que zarpar en busca
de la Fuente de la Eterna Juventud, Jack Sparrow se reencuentra con Angelica,
una antigua amante que se ha hecho pasar por él para reclutar una tripulación
con la que encontrar la Fuente. Pero los problemas crecen al descubrir que
Angelica es en realidad la hija del más terrible pirata de todos, Barbanegra.
Crítica: Innecesaria cuarte parte que enlaza con una
mínima parte del final de Piratas del Caribe: En el Fin del Mundo [Gore
Verbinski, 2007], pero que se deshace de toda la magia y la épica de sus
predecesoras para convertirse en una película repleta de fallos garrafales por
doquier, donde las ausencias de Orlando Bloom y Keira Knightley pesan como
dinosaurios muertos en tanto su guión se lanza unas flatulencias narrativas
dignas de partir en dos el Vesubio (Penélope Cruz, nulidad absoluta que encima
ni siquiera se dobla a si misma en su versión al español: su rollo fraternal
con Barbanegra es tan poco creíble como su pasado común con Sparrow;
¿Barbanegra, el pirata al que temen los piratas?, ¿y dónde estuvo las tres
películas anteriores, que no le mencionaron ni siquiera de pasada?; Óscar
Jaenada, surgiendo de la nada para, figurada y literalmente, cargárselo todo:
ejemplo último de como nunca hay que acabar una película). Deslucida y bastante
más oscura en su fotografía como extraña en su ambientación, el director de
Chicago [2002] y Memorias de una Geisha [2005] construye un espectáculo de
amargo sabor y más amargo regusto, que carece de encanto y gracia y que además posee
subtramas impepinables (la relación entre Sirenia y Swift: ¿un predicador y
hombre de Dios enamorándose de una sirena?; la voz de Barbanegra como la de
Sirenia, igual de farragosas y desacertadas como la de Cruz, que no le pegan
para nada a sus personajes; la completa ausencia de abordajes o de peleas a
cañonazos: ¿no se suponía que es una película de piratas?). Una deleznable y
mísera producción que queda a años-luz de cualquier atisbo de dignidad, que se
antoja fría y sin emoción, y donde banda sonora solo replica acordes
ampliamente conocidos, sin aportar algo nuevo. Un largometraje donde, salvo
Depp, lo demás se precipita por el abismo de la insensatez. Y la ausencia de
Pintel y Raghetti, imperdonable.
La Puntilla: ¿En serio pensaban que una peli sin Will
Turner, Elizabeth Swann y los demás piratas podría funcionar?. Hay que ser
ingenuo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario