Publicado El: Domingo, 6-Mar-2016. Nº De Serie: C25/TCM/0000432.
Vista En: Cines Odeón (Corvera), jueves 3 de marzo de
2016.
Título Original: Palmeras en la Nieve.
Director: Fernando González Molina.
Guión: Sergio G. Sánchez, basado en la novela
homónima de Luz Gabás, publicada en 2012. Género: Drama.
Música: Lucas Vidal. Fotografía: Xavi Giménez.
Decorados: Laura García, Manuel Ludeña y Sebastián Velásquez. Vestuario: Loles García Galean.
Productoras: Warner Bros. Pictures International, Atresmedia Cine, Dynamo, Telefonica Studios y Nostromo Pictures.
Productoras: Warner Bros. Pictures International, Atresmedia Cine, Dynamo, Telefonica Studios y Nostromo Pictures.
Presupuesto: ±10.000.000 € (±10.940.000 $).
País: España. Año: 2015. Duración: 163 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Mario Casas
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Killian
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Adriana Ugarte
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Clarence
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Macarena García
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Julia
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Alain Hernández
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Jacobo
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Berta Vázquez
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Bisila
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Djedje Apali
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Iniko
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Daniel Grao
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Manuel
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Jose María Kimbo
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Ose
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Fernando Cayo
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Garuz
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Luis Callejo
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Gregorio
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Laia Costa
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Daniela
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Emilio Gutiérrez Caba
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Antón
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Clarence es una joven que tras la muerte de
su padre encuentra en sus legajos unos papeles que la llevan a investigar el
pasado familiar de él y de su tío Killian. Esto la lleva hasta Guinea
Ecuatorial, cuando a principios de los años 50 éstos fueron a trabajar en una
plantación, con una incipiente revolución en ciernes que amenaza con cambiar el
país entero.
Crítica: Inmensa adaptación de la novela de Gabás que
sorprende por su más que extensa duración y cuya puesta en escena sirve tanto
para regresar a una época olvidada por las siguientes generaciones como para
contar una historia a caballo entre dos épocas, con un reparto casi perfecto
(Clarence, obcecada en conocer su pasado familiar; Killian, en busca de su
lugar en un mundo con demasiados puntos oscuros: la pose de Mario Casas de “hey
nena, si me miras te derrito” ya resulta algo cansina). Molina, autor de Fuga
de Cerebros [2009] y de Tres Metros Sobre el Cielo [2010], se zambulle de pleno
en una época de convulsiones y protestas, así como de historias de amor salpicadas
con la peor de las crudezas (Jacobo, un caradura de lo más despreciable;
Gregorio, todo un negrero hecho para ser odiado desde el minuto uno; la
relación de Killian con Bisila o la de Jacobo con Julia, tan difíciles como la
situación política de la isla). Recreada de forma muy loable cuyo amor por los
detalles resulta tan bien aprovechado como algunos de sus secundarios, caso de
Emilio Gutiérrez Caba y de Djedje Apali (excepcional el primero, interesante el
segundo). Con una narración lenta que intenta contar varias tramas paralelas y
que sitúa la historia separada por más de 60 años, esta se convierte en un
trago amargo al exponer sin adulterar los traumas y odios de un modo de pensar,
y al mismo tiempo en un canto a la vida por encima de esto mismo (Killian,
descubriendo las hipocresías de algunos compañeros de trabajo; Clarence,
destrozada tras conocer cierto acto cometido por su padre; el intento de
Killian por huir con Bisila del país). Digna de una superproducción al más puro
estilo Hollywood, Palmeras en la Nieve posee todos los requisitos de una
película con múltiples lecturas, diseñada como un circo de tres pistas con una
fotografía increíble y una música acorde con todo los demás. Un peliculón a la
vieja usanza.
La Puntilla: Mario Casas y sus posados: con camiseta, sin
camiseta...y ahora hasta con barba. Muy bien, chaval: vamos progresando.
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