Publicado El: Miércoles, 4-Nov-2015. Nº De Serie: C25/TCM/0000239.
Vista En: Cines Odeón (Corvera), martes 3 de noviembre
de 2015.
Título Original: The Intern.
Directora: Nancy Meyers.
Guión: Nancy Meyers. Género: Comedia.
Música: Theodore Shapiro. Fotografía: Stephen Goldblatt.
Decorados: Susan Bode. Vestuario: Jacqueline Demetrio.
Productora: Waverly Films. Presupuesto: ±35.000.000 $.
Productora: Waverly Films. Presupuesto: ±35.000.000 $.
País: USA. Año: 2015. Duración: 121 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Robert De Niro
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Ben
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Anne Hathaway
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Jules
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Rene Russo
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Fiona
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Anders Holm
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Matt
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JoJo Kushner
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Paige
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Andrew Rannells
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Cameron
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Adam DeVine
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Jason
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Zack Pearlman
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Davis
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Jason Orley
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Lewis
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Christina Scherer
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Becky
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Nat Wolff
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Justin
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Linda Lavin
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Patty
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Ben Whittaker es un viudo de 70 años al que
su jubilación no le acaba de sentar bien. Buscando algo para volver a sentirse
útil, encuentra un trabajo como becario en la empresa creada por la joven y
prometedora Jules Ostin. Extraño al principio, Ben encuentra una inesperada
aliada en la propia Jules, cuya amistad hará que las vidas de ambos se vean muy
cambiadas.
Crítica: Tal y como ya hiciera con Mel Gibson en ¿En
qué Piensan las Mujeres? [2000], Nancy Meyers saca la más brillante y amable
versión de un Robert De Niro que hace virguerías con un papel que revalida el
dicho “la veteranía es un grado” (su relación con Jason, Davis y Lewis,
definición perfecta de lo que son los hipsters del siglo XXI; el inicio, en el
que éste graba su entrevista). Un film cuya mayor baza reside en el choque de
sus dos estrellas principales, y que a la vez sirve como interesante
comparativa entre una manera de ver la vida que parece en vías de extinción,
frente a una nueva generación que da claros signos haber perdido su brújula
moral (Ben, hablando sobre pañuelos de mano, o luciendo siempre impecable;
Jules, genial como empresaria pero desastrosa en todo lo demás; el progresivo
acercamiento entre ambos, de una naturalidad pasmosa). Melodrama sin acritudes
ni villanos, llega a rechinar un poco por su excesiva benevolencia y buenos
sentimientos, aunque por fortuna sabe crear un par de conflictos para dar un
necesario contrapunto de realidad (Rene Russo, llevándose el gato al agua
gracias a su encanto natural; Jules, derrumbándose en una habitación de hotel
frente a un atento Ben: su réplica es sencillamente genial). Delirante en
ciertos instantes pero más acertada en otros, Meyers confecciona una película
que busca inspirar mas que amargar, en una época donde las buenas venturas
suenan imposibles de creer (Ben y el trío hipster, entrando en casa de la madre
de Jules: tal vez el momento más absurdo y cómico de todos; ésta, con un par de
copas de más). Confrontando los 72 años de uno contra los 33 de la otra, El
Becario es un más que correcto ejemplo de que la edad, más que un hándicap, es
un tesoro a tener en cuenta por las nuevas hornadas, plasmado en el entusiasmo
y vitalidad infinitas de un carismático Ben Whittaker. Deliciosamente
entrañable y entretenida.
La Puntilla: “¿Viejo?. Pues a ver si os enteráis, pinines:
este viejo os da cien mil vueltas de tal modo que vais a acabar todos
mareados”.
Mi
Valoración
★★★★★
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