Vista En: Tele 5, viernes 23 de octubre de 1998.
Título Original: The Fugitive.
Director: Andrew Davis.
Guión: Jeb Stuart y David Twohy, basado en una
historia original de David Twohy, basado en la serie de televisión homónima,
creada por Roy Huggins y Quinn Martin, estrenada en 1963. Género: Acción.
Música: James Newton Howard. Fotografía: Michael Chapman.
Decorados: Rick Gentz. Vestuario: Aggie Guerard Rodgers.
Productoras: Warner Bros. Presupuesto: ±44.000.000 $.
País: USA. Año: 1993. Duración: 130 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Harrison Ford
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Dr. Richard Kimble
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Tommy Lee Jones
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Samuel ‘Sam’ Gerard
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Sela Ward
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Helen Kimble
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Julianne Moore
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Dra. Anne Eastman
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Joe Pantoliano
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Cosmo Renfro
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Andreas Katsulas
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Frederick Sykes
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Jeroen Krabbe
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Dr. Charles Nichols
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Daniel Roebuck
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Bobby Biggs
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L. Scott Caldwell
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Erin Poole
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Tom Wood
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Noah Newman
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Ron Dean
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Detective Kelly
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Joseph F. Kosala
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Detective Rosetti
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Richard Kimble es un reputado médico de
Chicago al que acusan de haber matado a su esposa. Llevado a juicio y condenado
por ello, se fuga cuando el autobús en donde es trasladado tiene un accidente.
Un equipo de los Marshal, dirigido por Sam Gerard, deduce la fuga de Kimble y
se propone capturarlo, mientras que éste busca al verdadero asesino de su
esposa.
Crítica: Adaptación para la gran pantalla de la serie
de TV protagonizada por David Janssen y Barry Morse, en que Harrison Ford y
Tommy Lee Jones toman el relevo de Janssen y Morse respectivamente para fabular
un thriller dirigido por el artífice de Código de Silencio [1985] y Por Encima
de la Ley [1988], al que no le faltan momentos de vértigo y tensión por igual,
con algún que otro descuelgue extrañamente mal resuelto y aristas mucho más
interesantes (el papel de Julianne Moore, que da la sensación fue muy recortado
en la sala de montaje; el careo entre ambos, perseguido y perseguidor, en un
túnel de una presa, con el primero tomando una decisión límite para evitar ser
capturado; Gerard, hablando al oído de Newman, un subordinado suyo, diciéndole
«Yo no negocio»: epic moment a la enésima potencia). Fabulosa en la banda
sonora de un muy inspirado James Newton Howard como en la fotografía de Michael
Chapman, ambos se convierten en cimientos sólidos y germen de un guión al que
no le fallan las fuerzas ni un segundo, entre delirante y angustioso según el
momento (el bus, combado y cruzado en una vía con un tren acercándose a toda
pastilla con Kimble dentro: para ponerlos de corbata; el asesinato de la mujer
de Kimble y el posterior juicio a éste, reflejo de la ley más sectaria y
parcial vista en mucho tiempo; Kimble y Gerard, hablando por teléfono). Sin más
paliativos que añadirle, El Fugitivo es un proyecto perpetrado con gran
calidad, una carrera de fondo infatigable y una persecución que no da tregua
ninguna (la parte final en un hotel, convertido en un laberinto donde todos se
persiguen entre si; Gerard, hablando con Nichols, recibiendo de éste un aviso
sobre lo listo que es Kimble; los parajes, invernales y apagados, reflejo de la
desolación de un hombre que busca limpiar su nombre contra otro que busca
atraparle). Una verdadera bomba de precisión que estalla por todo lo alto.
La Puntilla: Te acusan. Te juzgan. Te condenan. Y aún así
eres inocente. Tal vez no exista situación más enloquecedora que esa.
Mi
Valoración
★★★★★
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