Vista En: Cines Cinebox (Corvera), sábado 15 de
noviembre de 2008.
Título Original: Swing Vote.
Director: Joshua Michael Stern.
Guión: Jason Richman y Joshua Michael Stern. Género: Comedia.
Música: John Debney. Fotografía: Shane Hurlbut.
Decorados: Marcia Calosio. Vestuario: Lisa Jensen.
Productoras: Touchstone Pictures, Radar Pictures, 1821
Pictures, Treehouse Films, Tig Productions y G&M Films. Presupuesto: ±21.000.000 $.
País: USA. Año: 2008. Duración: 120 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Kevin Costner
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Bud Johnson
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Madeline Carroll
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Molly Johnson
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Paula Patton
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Kate Madison
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Kelsey Grammer
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Presidente Andrew Boone
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Dennis Hopper
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Donald Greenleaf
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Nathan Lane
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Art Crumb
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Stanley Tucci
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Martin Fox
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George Lopez
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John Sweeney
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Judge Reinhold
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Walter
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Richard Petty
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Richard Petty
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Willie Nelson
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Willie Nelson
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Mare Winningham
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Larissa Johnson
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Bud Johnson es un trabajador de un pequeño
pueblo de Nuevo México que vive con su hija Molly, que busca que su padre salga
de la pereza que lo domina. Votando por él en secreto en las elecciones, Bud se
encuentra de pronto en el ojo mediático de todo el país cuando su voto se
pierde y el resultado queda tan igual que solo él es capaz de romper el empate.
Crítica: Segundo trabajo para Stern después de El
Libro Mágico [2005], en el que gracias a la estupenda labor de un Kevin Costner
en horas bajas que hace de su decadencia actoral, alejada de papeles como JFK.
Caso Abierto [Oliver Stone, 1991], un filón inesperado para interpretar
antihéroes con una sobrada solvencia y credibilidad, metido en la piel de un
perdedor desencantado con la vida a la que ésta de pronto pone en una situación
imposible (Bud, un vago amante de la cerveza y de dormir vestido cuya relación
con su hija pequeña Molly es el único escoldo de luz en una vida de tinieblas;
Boone y Greenleaf, haciendo delirantes campañas para que éste les vote, teniendo
que ejercer un impresionante y divertido pelotilleo político: tanto Grammer
como Hopper están de punta en blanco en sus personajes, metiendo a ambos en un
limbo para no exista un malvado claro y así dificultar la elección). Jugando
tanto a la comedia blanda como a la sátira política, El Último Voto intenta ir
más allá de lo meramente presidencial para, en lo absurdo de su premisa inicial
(algo altamente improbable de que ocurra en la vida real), crear un relato
sobre la caída en desgracia y la posterior redención, a veces tomando
vericuetos que se revelan un poco difíciles de creer, casi como un intento de
volver a aquel cine mágico de Frank Capra a lo ¡Que Bello es Vivir! [1946] (los
intentos de Molly por reencauzar la vida de su padre; Kate, una avispada periodista
cuyo hallazgo sobre la verdad de Bud la lleva a tomar una insólita decisión;
éste, en el mitin final, dando un discurso que permite recordar aquella
habilidad de Costner para ser cautivador). El Último Voto es una película
pequeña a la par que entrañable que mezcla sus elementos con la suficiente
pericia para hacer un cóctel agridulce pero fácil digestión, sobretodo por
Madeline Carroll y su jovencísima Molly, que con 11 años se come la peli. Con
patatas deluxe.
La Puntilla: ¿La presidencia del país más poderoso de la
Tierra dependiendo de un solo voto?. ¡Eso sí que es una guerra y no lo de
Vietnam!.
Mi
Valoración
★★★★★
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