Vista En: Cines Almirante (Avilés), lunes 20 de
diciembre de 1999.
Título Original: End of Days.
Director: Peter Hyams.
Guión: Andrew W. Marlowe. Género: Fantástico.
Música: John Debney. Fotografía: Peter Hyams.
Decorados: Gary Fettis. Vestuario: Bobbie Mannix.
Productoras: Beacon Communications, Beacon Pictures y
Lucifilms.
Presupuesto: ±100.000.000 $.
País: USA. Año: 1999. Duración: 121 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Arnold Schwarzenegger
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Jericho Cane
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Gabriel Byrne
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El Hombre/Satan
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Robin Tunney
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Christine York
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Kevin Pollak
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Bobby Chicago
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CCH Pounder
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Detective Margie Francis
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Rod Steiger
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Padre Kovak
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Derrick O’Connor
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Thomas Aquinas
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Rainer Judd
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Madre de Christine
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Miriam Margolyes
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Mabel
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Udo Kier
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Dr. Abel
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Victor Varnado
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Albino
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Michael O’Hagan
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Cardenal del Vaticano
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: En las horas previas a la Nochevieja de 1999,
El Diablo escapa del Infierno para poseer un cuerpo humano con el que concebir
el Anticristo a través de una chica elegida desde su mismo nacimiento,
Christine York. Pero un ex policía reconvertido a guardaespaldas, Jericho Cane,
deberá evitar que suceda para que el Diablo no desate su reino de maldad en la
Tierra.
Crítica: El siempre artesano y simpático Peter Hyams,
autor de secuelas tipo 2010: Odisea Dos [1984] y títulos como Timecop: Policía
en el Tiempo [1994], traslada el personaje de Van Damme de aquella a un
deslustrado y protestón Arnold Schwarzenegger, en una película cuyo guión es
más simple que un ajo y que se limita a confeccionar una serie de peligros y
monstruosidades, cuya atmósfera busca imitar a la de Seven [David Fincher,
1995] (el hallazgo en un hospital de un cadáver...colgado del techo; la
descripción de Nueva York, de un sombrío amenazador en todo momento; la
angelical Robin Tunney, en un personaje torturado por visiones de todo tipo: la
de un hombre que se rompe como un jarrón es inquietante). Pobremente ejecutada
en sus trazos y con un par de explicaciones traídas por los pelos, el grueso de
la película contiene algunas secuencias bien montadas tanto en los diálogos
como la ambientación pero el resto se va por la pendiente del disparate (Rod
Steiger, genial pese a lo limitado de su personaje: su explicación sobre lo de
“1999” es para hacer reír; el duelo entre Cane y Satán, en que éste le recuerda
la tragedia donde murieron su mujer y su hija: Gabriel Byrne disfruta de lo
lindo; el nombre de ‘Christine York’, porque va sobre Cristo y se ambienta en
Nueva York: ¿pero de verdad hay guionistas a la que pagan por estas
simplonerías?). Apuntalada muy bien en secundarios como Kevin Pollak y CCH
Pounder, El Fin de los Días derrocha su gran potencial por el carisma de su
estrella principal, dejando lo demás en el tintero para convertir el pánico al
famoso Y2K (el famoso a la vez que supuesto apagón tecnológico producido por el
cambio de siglo) en un pánico satánico (éste, visitando a un acólito para
conocer muy íntimamente a la mujer e hija de éste...a la vez; el clímax final,
en la iglesia, predecible al 100%). Una película entretenida, pero que merecía
mucha mejor fortuna.
La Puntilla: El día que adapten las estrellas de cine a
los guiones en vez de los guiones a las estrellas, es cuando las películas
serán cojonudas.
Mi
Valoración
★★★★★
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