Vista En: Youtube, lunes 27 de febrero de 2017.
Título Original: Top Fighter 2: Deadly Fighting Dolls.
Director: Toby Russell.
Guión: George Tan. Género: Documental.
Música: [No hay compositor]. Fotografía: [No hay fotógrafo].
Decorados: [No hay decorador]. Vestuario: [No hay diseñador].
Productora: Eastern Heroes Video. Presupuesto: [Desconocido].
País: Hong Kong. Año: 1996. Duración: 90 minutos. Color y B/N.
Reparto:
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Personajes:
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Shenagh Cameron
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Narradora
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Yukari Ôshima
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Ella misma (también imagen de archivo)
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Michelle Yeoh
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Ella misma (también imagen de archivo)
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Angela Mao
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Ella misma (imagen de archivo)
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Michiko Nishiwaki
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Ella misma (imagen de archivo)
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Pei-Pei Cheng
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Ella misma (imagen de archivo)
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Lin Tung
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Ella misma (también imagen de archivo)
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Moon Lee
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Ella misma (también imagen de archivo)
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Judy Lee
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Ella misma (también imagen de archivo)
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Polly Shang Kwan
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Ella misma (también imagen de archivo)
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Shih Szu
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Ella misma (imagen de archivo)
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Cynthia Rothrock
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Ella misma (también imagen de archivo)
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Mientras estrellas masculinas de artes
marciales como Bruce Lee asombraban al mundo con sus proezas, los productores
también posaron su mirada en algunas mujeres. Este documental repasa la trayectoria
de algunas de ellas así como la huella que dejaron en sus películas, abriendo
el camino a futuras generaciones y probando que las chicas también saben pegar.
Crítica: Secuela de Top Fighter [Toby Russell, 1995]
rodada acto seguido de su predecesora y centrándose exclusivamente en lo que
supuso la entrada de la mujer dentro del mundo del cine y las artes marciales,
granando los años 60, 70y 80 de una serie de rostros que alcanzaron una gran
popularidad tanto por su más que notable belleza física como por su capacidad
de dar patadas y puñetazos para poner a raya al más duro de los hombres (el
hecho de centrar toda su atención en el mercado asiático, dado que en occidente
mujeres que fuesen estrellas de artes marciales no había en aquella época; los
combates, que al igual que en la primera parte, lucen espléndidamente bien,
aunque en algunos se note cierta vena artificiosa en sus orígenes, a posteriori
adquieren fluidez y naturalidad; los insertos de las escenas de acción, de
nuevo sin el consabido subtitulo para identificar a cual pertenecen).
Evidenciando y de un modo más que notable el cambio de época tanto en las
películas como en las peleas y el estilo de lucha, Top Fighter 2 se realiza
como una más que justa contrapartida de su primera propuesta masculina, curioso
e interesante en el testimonio de algunas de las actrices como su
reivindicación de la mujer en el terreno del combate cuerpo a cuerpo (algunas
acrobacias y piruetas, de una espectacularidad tan disfrutable como peligrosa
en ocasiones: lo de Moon Lee y la explosión antes de tiempo es de poner los
pelos de punta; el hecho de no usar especialistas, haciendo que cada escena sea
de un realismo más físico y creíble; la irrupción de Cynthia Rothrock o Sophie
Crawford, o lo que es lo mismo: la entrada de occidente para decir que las
artes marciales no saben de sexo, ni tampoco de razas). Un trabajo más que
decente que, tomando el camino de la igualdad, se sirve como una pica en
Flandes sobre el camino de la mujer en el cine de acción. Ciertamente, un
trabajo bien notable.
La Puntilla: El que piense que las artes marciales es cosa
de hombres, es que no tiene ni repajolera idea de lo que está hablando.
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