“Criticaen25” es un punto de encuentro para todos los cinefilios, habitantes del séptimo planeta del sistema solar de las artes. Una propuesta amena y divertida a la par que abierta al debate y a la reflexión en la que, tan diariamente como sea posible, se irán comentando películas de todos los tiempos, con independencia de su género o fama. Un lugar en donde relajarse y disfrutar de un rato agradable en buena compañía.

Tomorrowland: El Mundo del Mañana [2015]

 Publicado El: Lunes, 15-Jun-2015. Nº De Serie: C25/TCM/0000005.
 Vista En: Cines Los Prados (Oviedo), sábado 30 de mayo de 2015.
 Título Original: Tomorrowland.
 Director: Brad Bird.
 Guión: Brad Bird, Damon Lindelof y Jeff Jensen. Género: Ciencia Ficción.
 Música: Michael Giacchino. Fotografía: Claudio Miranda.
 Decorados: Lin MacDonald y Mike Keel. Vestuario: Jeffrey Kurland.
 Productoras: Walt Disney Pictures, A113 y Babieka.
 Presupuesto: ±190.000.000 $.
 Países: USA y España. Año: 2015. Duración: 130 minutos. Color.

Reparto:
Personajes:
George Clooney
Frank Walker
Hugh Laurie
David Nix
Britt Robertson
Casey Newton
Raffey Cassidy
Athena
Tim McGraw
Eddie Newton
Kathryn Hahn
Ursula
Keegan-Michael Key
Hugo
Thomas Robinson
Joven Frank Walker
Pierce Gagnon
Nate Newton
Matthew MacCaull
Dave Clark

 (Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)

 Argumento: Casey Newton es una adolescente que tras tocar un pin, se ve misteriosamente transportada a una ciudad futurista. Queriendo saber quién le dio el pin conoce a una niña, Athena, y a un hombre, Frank Walker, que la llevarán a conocer Tomorrowland, un lugar en donde los más inteligentes del planeta se reúnen para concebir inventos que sobrepasan la imaginación.

 Crítica: El director de Los Increíbles [2004] y la cuarta parte de la franquicia de Ethan Hunt se pone al mando de la adaptación al cine del parque temático de la casa Disney con una película de cuidadísimo aspecto visual (la llegada de Casey a Tomorrowland, un larguísimo y asombroso traveling sin cortes de cámara que pone de manifiesto el agudo ojo de Bird) pero que posee también un descuidadísimo aspecto narrativo debido a su guionista, un Damon Lindelof reincidiendo una vez más en las mismas tesituras ya utilizadas en Prometheus [Ridley Scott, 2012] y en la serie Perdidos [2004], haciendo que el guión tenga más agujeros que una regadera (la propia Tomorrowland: ¿se construyó en un futuro lejano, en otro planeta, otra dimensión o todo a la vez?). Un desastre que echa por tierras todos sus buenos elementos, hasta los tan solo sugeridos (el reencuentro entre Frank y Nix (Hugh Laurie lejos, muy lejos de su doctor House), con una charla muy interesante; el prólogo, ambientado en los 60), convirtiendo una odisea que versa sobre el destino, el futuro y la posibilidad de cambiarlo en un viaje repleto de incongruencias, unas más disimuladas, pero otras del tamaño de una casa de tres pisos (las referencias al misterioso invento de Frank; Casey, manejando una pantalla tridimensional; la parte en París, de un absurdo inconcebible), y si bien en los apartados de fotografía y banda sonora el film no flojea ni chirria, no puede decirse lo mismo de otros instantes que parecen sospechosamente copiados/plagiados de otros títulos (cierto discursito, demasiado similar al de Watchmen [Zack Snyder, 2009]; el aspecto ajado de Tomorrowland, que parece copiado de un Blade Runner de rebajas). Un proyecto incapaz de cumplir sus propias promesas, con un final tan políticamente correcto que rechina, que envía los 190 millones de dólares de su presupuesto directamente al limbo de las oportunidades perdidas. 

 La Puntilla: Un hombre adulto enamorado de una niña pequeña. Ah, estas pelis Disney, siempre tan recatadas y modositas.
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