Vista En: Cines Odeón (Corvera), miércoles 3 de enero
de 2018.
Título Original: The Greatest Showman.
Director: Michael Gracey.
Guión: Jenny Bicks y Bill Condon, basado en una
historia original de Jenny Bicks. Género: Musical.
Música: John Debney y Joseph Trapanese. Fotografía: Seamos MacGarvey.
Decorados: Debra Schutt. Vestuario: Ellen Mirojnick.
Productoras: Chernin Entertainment, TSG Entertainment y
Twentieth Century Fox. Presupuesto: ±84.000.000 $.
País: USA. Año: 2017. Duración: 105 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Hugh Jackman
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Phineas Taylor ‘P.T.’ Barnum
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Michelle Williams
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Charity Hallett-Barnum
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Zac Efron
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Phillip Carlyle
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Zendaya
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Anne Wheeler
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Rebecca Ferguson
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Jenny Lind
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Austyn Johnson
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Caroline Barnum
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Cameron Seely
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Helen Barnum
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Paul Sparks
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James Gordon Bennett
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Keala Settle
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Lettie Lutz
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Sam Humphrey
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Tom Thumb
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Yahya Abdul-Mateen II
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W.D. Wheeler
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Eric Anderson
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O’Malley
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: En el siglo XIX, P.T. Barnum es un hombre de
clase humilde que consigue casarse con el amor de su infancia, Charity Hallett.
Cuando debido a una bancarrota de la empresa donde trabaja es despedido, decide
fundar un museo de excentricidades, que reconvierte en circo de prodigios y
fenómenos con el que consigue cumplir sus sueños de conseguir fama y fortuna.
Crítica: Biografía en clave musical del real P.T.
Barnum (1810-1891), con el que Hugh Jackman saca la versión de si mismo para
dar demostrar que canta y baila como nadie tal que ya hiciese en musicales de
Broadway, ornado con una fastuosa e impresionante puesta en escena, componiendo
unos números y canciones dignos de arrebatar el corazón (el prólogo, con
Jackman dejando muy clarito por donde irán los tiros; Michelle Williams,
enérgica y preciosa en su papel, una mujer que incluso cuando su marido es
despedido es incapaz de perder la sonrisa; Zac Efron, volviendo a cantar tras
la trilogía de High School Musical [Kenny Ortega, 2006-2007-2008], un hombre
atrapado en la burguesía de clase alta en busca de abrirse camino por si
mismo). Firme alegato a favor de lo diferente y nada sutil puya hacia los clasismos
de antaño, el supervisor de efectos especiales en títulos como Cubbyhouse: La
Cabaña [Murray Fahey, 2001] realiza un espléndido debut en la dirección, en la
que no hay lugar para el aburrimiento (la canción “Rewrite the Stars”, a cargo
de dos almibarados y románticos Wheeler y Carlyle, con ella sacando toda su
sensualidad y belleza a escena y él enamorando a todas las féminas a base de
miradas; la reacción de la tropa circense cuando Barnum les impide estar en un
convite de la clase alta: epic moment con la abanderada “This is Me” resonando
a todo volumen; las idas y venidas de Bennett, un crítico teatral que intenta
hundir a Barnum y su espectáculo). Si bien tiene un punto amargo por sus
licencias artísticas y alguna trama secundaria, El Gran Showman es un
tour-de-force visualmente impresionante con canciones preciosas como “A Million
Dreams”, en un típico cuento de “ascenso/caída/redención” que sigue punto a
punto tal axioma (la aparición de Jenny Lind, increíble Rebecca Ferguson: la
calma que precede a la tempestad). Un film cuyo potencial lo encumbra a la
estratosfera.
La Puntilla: Cuando la vida se convierte en un
espectáculo, hay que tener un especial cuidado para evitar que el espectáculo
te atrape a ti.
Mi
Valoración
★★★★★
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