Vista En: TVE-1, domingo 19 de marzo de 1989.
Título Original: X: The Man with the X-Ray Eyes.
Director: Roger Corman.
Guión: Robert Dillon y Ray Russell, basado en una
historia original de Ray Russell. Género: Terror.
Música: Les Baxter. Fotografía: Floyd Crosby.
Decorados: Harry Reif. Vestuario: Marjorie Corso.
Productora: Alta Vista Productions. Presupuesto: ±250.000 $.
País: USA. Año: 1963. Duración: 79 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Ray Milland
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Dr. James Xavier
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Diana van der Vlis
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Dra. Diane Fairfax
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Harold J. Stone
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Dr. Sam Brant
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John Hoyt
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Dr. Willard Benson
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Don Rickles
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Crane
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: El Dr. James Xavier es un científico que se
somete a si mismo a un experimento, echándose unas gotas de su invención en los
ojos con la idea de tener una visión de rayos X y de ese modo ejercer mejor la
medicina. Pero lo que en su momento Xavier cree como algo milagroso e innovador
comienza a darle problemas a su cada vez menos capacidad para controlarlo.
Crítica: Haciendo un breve alto en el camino de sus
adaptaciones de novelas de Edgar Allan Poe, el autor de intrascendencias
fantásticas de serie B como Yo Fui un Cavernícola Adolescente [1958] y de La
Mujer Avispa [1959] crea un largometraje de modestísima factura pero de
elegante puesta en escena, que sirve para reencontrar a Corman y a Milland
después de la genial La Obsesión [1962], haciendo del viejo refrán de “el
camino del infierno está plagado de buenas intenciones” su motor principal para
escribir un guión que sabe dar el debido uso a los efectos especiales (Xavier,
encontrándose con un problema inesperado cuando, bailando en una fiesta,
descubre que sus ojos no perciben la ropa de los asistentes: un momento que
podría haber sido muy incómodo por el despliegue de personas desnudas resuelto
de los modos más ingeniosos; el instante en el que, como si fuese Superman,
Xavier atiende a una herida y es capaz de ver el daño de dentro de su cuerpo:
una escena bien ejecutada y que hace de un examen médico algo de pura ciencia
ficción). Fascinante por la recurrente idea de la cámara subjetiva para así ver
lo que el propio Xavier está viendo, y con un potente Les Baxter que compone
una banda sonora que es sencillamente perfecta, El Hombre con Rayos-X en los
Ojos es fácilmente un ejemplo de como una película pequeña se transforma en una
lección de grandeza, planificación y brillantez. Una muy rara avis pero con
montón de puntos a su favor y ni uno en contra (el imparable y progresivo
declive mental y psicológico de Xavier, fruto de un don que se le va de las
manos: el instante en el que va de pasajero en el coche de Fairfax por la
ciudad y va explicando lo que sus hiperdesarrollados ojos ven es uno de ellos; la
belleza de Diana van der Vlis y su vibrante actuación), así como uno de esos
finales que dejan una profunda impresión debido a su último fotograma.
Excelente toda ella.
La Puntilla: El ojo humano percibe como un 10% del
espectro visible de luz. Eso significa que aún hay un aterrador 90% restante
por conocer.
Mi
Valoración
★★★★★
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