Vista En: Gnula.nu, jueves 21 de diciembre de 2017.
Título Original: The Crow: City of Angels.
Director: Tim Pope.
Guión: David S. Goyer, inspirado en el cómic El
Cuervo, de James O’Barr, publicado en 1989. Género: Fantástico.
Música: Graeme Revell. Fotografía: Jean-Yves Escoffier.
Decorados: Anne Kuljian. Vestuario: Kristen Everberg.
Productoras: Bad Bird Productions, Dimension Films, Jeff
Most Productions y Miramax. Presupuesto: ±13.000.000 $.
País: USA. Año: 1996. Duración: 84 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Vincent Perez
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Ashe Corven
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Mia Kirshner
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Sarah
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Richard Brooks
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Judah Earl
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Iggy Pop
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Curve
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Thomas Jane
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Nemo
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Vincent Castellanos
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Spider Monkey
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Thuy Trang
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Kali
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Eric Acosta
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Danny
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Ian Dury
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Noah
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Tracey Ellis
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Sybil
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Beverley Mitchell
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Grace
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Alan Gelfant
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Bassett
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Ashe Corven es un mecánico de Los Ángeles que
vive con su hijo de ocho años, Danny. Presenciando accidentalmente un
asesinato, ambos son también muertos por el mafioso Judah Earl. En la noche de
Todos los Santos Corven resucita, lo que le conecta con Sarah, quien años atrás
presenció la resurrección de Eric Draven y ahora vive obsesionada con la muerte.
Crítica: Facturada a toda velocidad y con prisa para
aprovechar el rebufo de la fama de su original El Cuervo [Alex Proyas, 1994],
el debutante Tim Pope, director en los 80 de conocidos videoclips como The Cars
“Magic” [1984] y de The Bangles “Eternal Flame” [1986] entre otros, realiza su
ópera prima como director con una película lastrada por la sombra de Brandon
Lee por más que intenta escapar de ella, recuperando/destruyendo al personaje
de Sarah, a la que da vida una oscura y perturbada Kirshner, en vez de la angelical
Rochelle Davis (la fotografía y sus escenarios, claramente inspirados en la
arquitectura de los años 20 y 40, conato para poner distancias como lo de
cambiar Detroit por Los Angeles: en todos los casos, un remiendo poco
inspirado; la aparición de la leyenda de la música Iggy Pop como Curve,
aprovechando la ocasión que había rechazado en la primera parte {fue candidato
a Fun Boy}: de lo escaso que realmente merece la pena, como su persecución por
carretera; Sarah y su imparable obsesión por lo vivido años atrás, que plasma
en dibujos de lo más inquietantes: ¿tan difícil era ponerla como un personaje
independiente y nuevo, sin que fuese un triste remanente del original?). Breve
en su duración como también escasa de solemnidad, lo cierto y verdad es que la
película se queda desde el principio a una lejana distancias de sus
intenciones, lo que la lleva a una mediocridad de la que nunca (Corven,
encontrándose sin poderes súbitamente: otra copia del original, aunque con
consecuencias bastante más paroxísticas en su tercer acto; el cuervo, quemando
todas las palmeras a su paso, un detalle que nada aporta a la trama pero que
resulta emocionante de ver; Judah Earl, un villano que como el Top Dollar de
entonces, se interesa y mucho por Corven y su cuervo). El Cuervo: Ciudad de
Ángeles, es un pálido reflejo lunar, a pesar de Vincent Perez y de sus buenas
intenciones.
La Puntilla: ¿Cómo se les ocurre, tan cercano en el tiempo
a la tragedia de Brandon Lee, hacer una segunda parte?. ¿No se lo vieron
venir?.
Mi
Valoración
★★★★★
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