Vista En: Youtube, jueves 11 de mayo de 2017.
Título Original: Equalizer 2000.
Director: Cirio H. Santiago.
Guión: Frederick Bailey, basado en una historia
original de Frederick Bailey y Joe Mari Avellana. Género: Ciencia Ficción.
Música: Edward Achacoso. Fotografía: Johnny Araojo.
Decorados: [Desconocido]. Vestuario: [Desconocido].
Productora: Premiere Productions. Presupuesto: [Desconocido].
Países: USA y Filipinas. Año: 1987. Duración: 85 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Richard Norton
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Slade
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Corinne Wahl
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Karen
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Robert Patrick
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Deke
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William Steis
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Lawton
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Frederick Bailey
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Hayward
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Rex Cutter
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Dixon
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Warren McLean
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Fletcher
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Peter Shilton
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MacLaine
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Don Gordon
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Gossage
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Ramon D’Salva
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Firewall
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Vic Diaz
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Bone
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Bobbie Greenwood
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Denah
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: En un futuro post-apocalíptico, un guerrero
de nombre Slade construye un arma especial llamada Equalizer 2000 con el único
objetivo de matar a Lawton, el líder de Los Gobernantes, después de que éste
asesinase a su padre. Para ello se une a una pacífica tribu de las montañas y a
un antiguo amigo de su padre con el propósito de formar una fuerza de choque.
Crítica: Infumable sofrito de medio pelo que rezuma a
copia barata y vive a la sombra de Mad Max 2: El Guerrero de la Carretera
[George Miller, 1981] tal que si le fuese la vida en ello, con un guión más
plano que un folio puesto de canto y una puesta en escena de la que su banda
sonora es lo único que, solo a veces, es mínimamente salvable en sus
sintetizadores ochenteros, en tanto el resto del metraje directamente se va al
abismo de la esquizofrenia fílmica en grado extremo (el vestuario de los
miembros de Los Gobernantes, desde fascistoides y vaqueros pasando por soldados
de la Guerra de Secesión todos teñidos de negro para que no se note; Slade,
luciendo abdominales y barba en un intento de salirse en vano del recuerdo de
Mel Gibson: a pesar de sus intentos, Norton es más soso que una sopa de saliva;
la pelea entre buenos y malos, unos con armas de fuego y automáticas y otros
con arcos y flechas, de una farragosidad que si no hace sangrar los ojos es de
maldita misericordia). Con algún que otro detalle sugerente como el modelito de
Corinne Wahl, que bien podría matar a sus enemigos a golpe de pectoral en vez
de a balazos, o la apariencia de la propia arma que da título a la película, lo
cierto es que Equalizer 2000 es una propuesta hecha sin complejos ni vergüenzas
como un homenaje-copia-plagio {y lo que haya entre medias} del film de Miller,
que se pasa su escaso metraje entre medias de la absoluta demencia y una serie
de secuencias que parecen sacadas de un mal viaje de lisérgicos (las pintas de
la Gente de la Montaña, más propio de una tribu medieval que otra cosa; las
coreografías de lucha en las peleas y en los combates, básicamente una hilera
de tropelías una detrás de otra como si fuesen una ristra de salchichas que
salieran de la fábrica; el final: sin palabras). Un film de la serie Z en
tamaño industrial, prueba de lo nulo que se puede llegar en calidad y decencia.
La Puntilla: Hay que reconocérselo: a este tipo de
películas, de tan idiotas, se les acaba cogiendo cariño. El porqué sigue siendo
un misterio.
Mi
Valoración
★★★★★
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