Vista En: Canal Hollywood, jueves 10 de noviembre de
2016.
Título Original: The Peacemaker.
Directora: Mimi Leder.
Guión: Michael Schiffer, basado en el libro One
Point Safe, de Leslie Redlich Cockburn y Andrew Cockburn, publicado en 1997. Género: Acción.
Música: Hans Zimmer. Fotografía: Dietrich Lohmann.
Decorados: Rosemary Brandenburg y Constantin Nikolic. Vestuario: Shelley Komarov.
Productora: DreamWorks. Presupuesto: ±50.000.000 $.
País: USA. Año: 1997. Duración: 124 minutos. Color.
Reparto:
|
Personajes:
|
George Clooney
|
Teniente Coronel Thomas Devoe
|
Nicole Kidman
|
Dra. Julia Kelly
|
Marcel Iures
|
Dušan Gavrich
|
Alexander Baluev
|
General Aleksandr Kodoroff
|
Rene Medvesek
|
Vlado Mirich
|
Gary Werntz
|
Terry Hamilton
|
Randall Batinkoff
|
Ken
|
Holt McCallany
|
Mark Appleton
|
Armin Mueller-Stahl
|
Dimitri Vertikoff
|
Jim Haynie
|
General Garnett
|
Michael Boatman
|
Teniente Beach
|
Carlos Gómez
|
Capitán Santiago
|
(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Julia Kelly es una doctora de física nuclear
que junto al coronel Thomas Devoe investigan una explosión nuclear en Europa
del Este por parte de una ojiva nuclear que iba en un convoy para su
desmantelamiento. Aunque sus teorías difieren, ambos están seguros que las
otras ojivas fueron robadas y que podrían ser parte de un futuro atentado
contra Estados Unidos.
Crítica: Leder, directora de capítulos en series de TV
y telefilmes como La Casa de los Secretos [1993] y Testigo Inocente [1994] hace
su salto al cine de gran pantalla con una trepidante y adrenalítica
superproducción para mayor gloria de un Clooney fuera de la serie Urgencias
[1994] preparado a probarse como superestrella y de una aguerrida Nicole Kidman
que se desprende de su pelirrojo natural para meterse en una trama con no pocas
connotaciones que van tanto sobre el peligro nuclear como de las consecuencias
de las guerras, todo ello en un cóctel que no da un segundo de respiro (la visita
de Devoe y Kelly a Vertikoff, con un Mueller-Stahl que demuestra que lo que
hizo en La Caja de Música [Costas-Gavras, 1988] es solo un mero atisbo del
actorazo que hay debajo; el inicio, con el robo de las cabezas nucleares y la
detonación de una de ellas: un remanente a muy pequeña escala de lo que debió
pasar en Chernobyl, pero aún así desgarrador; un flashback situado en plena
guerra de Bosnia, donde queda patente lo inmisericorde de un conflicto armado:
genial y terrible a la vez). Estupendísima en la banda sonora de Zimmer como en
las distintas localizaciones a lo largo y ancho del globo, El Pacificador
remata en alto el perfecto prototipo de película palomitera por excelencia,
hecha para ser emocionante e impactar tanto como para ofrecer un buen espectáculo
en bandeja de plata (Devoe, un militar con mucho de arrogante y otro tanto de
insolente, contrapunto idóneo para una Kelly mucho más sobria y cerebral; el
final, una persecución en plena Nueva York con el tiempo en contra y muchas
vidas en peligro: un laberinto de calles y callejones que siempre es perfecto
para ocasiones así; Gavrich, un hombre que lo ha perdido todo buscando una
cruenta revancha: impecable Marcel Iures). Una película cuya trama se ve un
poco supeditada al lucimiento de sus actores, pero aún así es sensacional.
La Puntilla: Cuando te matan a un ser querido deseas que
el mundo lo pague a fuego y muerte. Lo malo es quien decide llevar eso a la
realidad.
Mi
Valoración
★★★★★
No hay comentarios:
Publicar un comentario