Vista En: TVE-1, miércoles 6 de enero de 1988.
Título Original: Airplane!.
Directores: Jim Abrahams, David y Jerry Zucker.
Guión: Jim Abrahams, David y Jerry Zucker, basado en
el libreto de 1957 de Hall Bartlett, John C. Champion y Arthur Hailey, y basado
también en el de 1956 de Arthur Hailey. Género: Comedia.
Música: Elmer Bernstein. Fotografía: Joseph Biroc.
Decorados: Anne D. McCulley. Vestuario: Rosanna Norton.
Productora: Paramount Pictures. Presupuesto: ±3.500.000 $.
País: USA. Año: 1980. Duración: 88 minutos. Color.
Reparto:
|
Personajes:
|
Robert Hays
|
Ted Striker
|
Julie Hagerty
|
Elaine Dickinson
|
Leslie Nielsen
|
Dr. Rumack
|
Peter Graves
|
Capitán Clarence Cambion
|
Lloyd Bridges
|
Steve McCroskey
|
Robert Stack
|
Capitan Rex Kramer
|
Lorna Patterson
|
Randy
|
Stephen Stucker
|
Johnny Henshaw-Jacobs
|
Frank Ashmore
|
Victor Basta
|
Jonathan Banks
|
Gunderson
|
Kareem Abdul-Jabbar
|
Roger Murdock
|
Craig Berenson
|
Paul Carey
|
(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Ted Striker, un veterano de la Segunda Guerra
Mundial con un severo trauma a volar, se sube a un avión con el propósito de
recuperar a su novia Elaine, pero después de que en el avión se sirva comida en
mal estado y los dos pilotos enfermen, Ted será el único capacitado para
pilotar el aparato y hacerlo aterrizar, con ayuda de la torre de control de
Chicago.
Crítica: Brillantísima y despiadada comedia satírica
que toma de referencia a la saga iniciada por Aeropuerto [George Seaton, 1970],
que a su vez hace un remake humorístico de Suspense...Hora Cero [Hall Bartlett,
1957] como de un capítulo para TV de la serie La Hora Alcoa [1956], que acumula
una serie de gags y sketchs antológicos que, en su seriedad, acaban siendo
desternillantes en grado extremo (su inicio, una fugaz parodia a Tiburón
[Steven Spielberg, 1975] que ya anuncio por donde van los tiros; la secuencia
parodia de Fiebre del Sábado Noche [John Badham,1978], tan brillante como la
pelea por una partida de cartas que tiene lugar justo antes; Elaine, teniendo
que inflar de forma manual el “piloto automático”: uno de esos momentos de final
feliz de tirarse por el suelo). Con secundarios oligofrénicos de la talla de
Peter Graves o Lloyd Bridges, sin olvidar a un inolvidable Leslie Nielsen,
todos ellos sirven en bandeja de oro, que no de plata, un espectáculo a mayor
gloria de la risa más asalvajada, con un guión inteligente que inserta juegos
lingüísticos de lo más inesperados (Striker, pidiendo un pasaje para fumadores;
la inenarrable charla entre el Capitán Cambion y un niño pequeño que visita la
cabina del avión: sin palabras; Bridges, sin más: cada una de sus apariciones y
sus frases son tan valiosas como la presencia de Johnny Henshaw-Jacobs: un
diamante en bruto en cuanto a delirios y majaderías). Aterriza Como Puedas
invierte en 180 grados el genero catastrofista para demostrar hasta que punto
puede ser tomado a cachondeo con el matiz de, sin pretenderlo, ser 100%
irreverente (Striker, hablando sobre sus experiencias de guerra con el pasaje;
una chica, perdiendo los estribos: lo de después, demencial; el Dr. Rumack,
hablando al pasaje con un curioso problema en la nariz). Una rematada y
perfecta receta anti-depresiones, y Robert Hays está sencillamente
inconmensurable.
La Puntilla: No hay ni un insulto, ni una palabra soez, ni
cosas escatológicas, pero los niveles de risas son tan altos como los del mismo
avión.
Mi
Valoración
★★★★★
No hay comentarios:
Publicar un comentario