Publicado El: Lunes, 22-Feb-2016. Nº De Serie: C25/TCM/0000413.
Vista En: Cines Odeón (Corvera), domingo 21 de febrero
de 2016.
Título Original: Hail, Caesar!
Directores: Joel y Ethan Cohen.
Guión: Joel y Ethan Cohen. Género: Comedia.
Música: Carter Burwell. Fotografía: Roger Deakins.
Decorados: Nancy Haigh. Vestuario: Mary Zophres.
Productoras: Mike Zoss Productions y Working Title Films.
Productoras: Mike Zoss Productions y Working Title Films.
Presupuesto: ±22.000.000 $.
País: USA. Año: 2016. Duración: 106 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Josh Brolin
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Eddie Mannix
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George Clooney
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Baird Whitlock
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Alden Ehrenreich
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Hobie Doyle
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Ralph Fiennes
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Laurence Laurentz
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Scarlett Johansson
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DeeAnna Moran
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Tilda Swinton
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Thora Thacker/Thessaly Thacker
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Max Baker
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Jefe de los Guionistas
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Channing Tatum
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Burt Gurney
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Emily Beecham
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Dierdre
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Veronica Osorio
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Carlotta Valdez
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Heather Goldenhersh
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Natalie (secretaria)
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Alison Pill
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Sra. Mannix
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: En los años 50, Eddie Mannix es un agente de
Hollywood el cual trabaja para los grandes estudios con la finalidad de evitar
cualquier tipo de escándalo por parte de los actores. Cuando la gran estrella
Baird Whitlock es secuestrado, Mannix moviliza a todos sus contactos para
encontrar a Whitlock antes de que los medios y la prensa sepan de lo ocurrido.
Crítica: Enésimo regreso de los hermanos Cohen a su
particular universo con un sincero y desmelenado tributo al cine de los grandes
estudios de los años 40 y 50, en una película cuya virtud es al mismo tiempo su
defecto debido a la gran cantidad de estrellas que lo pueblan, generando que
algunos papeles sean poco menos que anecdóticos (caso de Alison Pill, Jonah
Hill, Christopher Lambert, Clancy Brown y Frances McDormand, escuetos al
máximo). Un viaje a los recovecos más oscuros de la época más glamurosa de la
industria, donde la realidad y la ficción se cruzan sin parar, en ocasiones de
maneras sibilinas y otras mucho más evidentes (Johansson, una Esther Williams
con mucho por esconder; Tatum y Osorio, copias sin rubor del estilo de Gene
Kelly y Carmen Miranda). Con un libreto que no da puntada sin hilo, los Cohen
aprovechan su metraje para llenarlo con escenas que con independencia de su
contenido, se esfuerzan por sacar la risa al espectador, con la correcta música
de Burwell y un magnífico vestuario diseñado por Mary Zophres, que sirve para
recrear una época mucho más elegante, encarnado en los trajes de Johansson,
Swinton o el propio Brolin. Contando con algunos números musicales que reviven
todo el esplendor del cine en su faceta más grandilocuente, los Cohen no
abandonan la comedia ni un solo segundo, haciendo un puntazo tras otro (la
discusión de Laurence con Hobie sobre decir una frase; Baird y sus raptores:
unas charlas muy hilarantes; Tilda Swinton, desdoblándose en dos hermanas que
no tienen un pelo de tontas). Una mirada que, con toque de comedia, en realidad
echa la vista atrás como ejemplo del clásico “No es oro todo lo que reluce”, en
un film justito en duración y contenido, cuyo guión no pierde fuelle, amparado
en una premisa del todo ficticia pero muy sugerente: ¿qué hubiera pasado si
durante el rodaje de Ben-Hur hubieran secuestrado a Charlon Heston?.
La Puntilla: ¿Y así era el Hollywood Dorado?. Ya lo dice
el refrán: “En todas las casas cuecen habas”. Y en Hollywood no cuecen:
arden.
Mi
Valoración
★★★★★
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