Vista En: Peliculas4.com, sábado 1 de octubre de 2016.
Título Original: Sunshine on Leith.
Director: Dexter Fletcher.
Guión: Stephen Greenhorn, basada en su propia obra
teatral homónima, estrenada en 2007. Género: Musical.
Música: Paul Englishby. Fotografía: George Richmond.
Decorados: [Desconocido]. Vestuario: Anna Robbins.
Productoras: Entertainment Film Distributors, Black Camel
Pictures, British Film Institute, DNA Films y Creative Scotland. Presupuesto: [Desconocido].
País: Reino Unido. Año: 2014. Duración: 100 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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George MacKay
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Davy
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Kevin Guthrie
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Ally
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Jane Horrocks
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Jean
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Peter Mullan
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Rab
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Freya Mavor
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Liz
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John Spence
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Brendan
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Paul McCole
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Ewan
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Emily-Jane Boyle
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Christine
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Antonia Thomas
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Yvonne
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Jason Flemyng
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Harry
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Emma Hartley-Miller
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Janice
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Paul Brannigan
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Ronnie
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Davy y Ally son dos amigos que vuelven a
Edimburgo tras pasar varios meses sirviendo en el ejército. Davy conoce a
Yvonne y Ally retoma su relación con Liz, la hermana de Davy, pero ambas
relaciones se verán puestas a prueba en tanto Jean y Rab, padres de Davy y Liz,
tendrán otro problema cuando ella sepa que él tiene una hija fruto de una
efímera infidelidad.
Crítica: Dexter Fletcher, actor en series como La
Pandilla Plumilla [1989] y películas como Lock & Stock [1998], realiza su
segundo largometraje después de Wild Bill [2011] en una impresionante y
vitalista adaptación de la obra de teatro, haciendo un especial hincapié en su
elenco de actores, todos ellos sin fallo en sus interpretaciones, y con el
mérito de, en su parte musical, utilizar únicamente canciones del grupo escocés
The Proclaimers, haciéndolo con una puntería digna de Robin Hood y con un gusto
exquisito, insertándolas de un modo natural y sin chirriar lo más mínimo (Davy
y Ally, en el bar, hablando de la posibilidad de hacer una pedida de mano; Liz,
en otro pub, poniéndose a contar historias sobre borrachos, haciendo de un
local tranquilito una fiesta por todo lo alto; la fotografía de Edimburgo,
meritoria en lo luminosa que es así como en el buen feeling de su cuarteto
protagonista). Un guión con garra que exprime cada posibilidad al máximo, es en
él donde reside todo cuanto la película necesita para ganarse la complicidad
con el espectador, cambiando las tornas en el momento preciso para añadir la
necesaria pizca de conflicto para cambiar las reglas del juego, equilibrando
tantas luces con un poco de oscuridades (el instante en que, casi a la vez, las
diferentes historias chocan entre sí causando el caos, digno de un reloj
atómico; Liz, una chica indecisa entre pasarse la vida en Edimburgo o largarse fuera
a buscar su destino; Jean, hundiéndose paulatinamente en el dolor hacia Rab:
Jane Horrocks, aquella de Little Voice [Mark Herman, 1998], está de fábula).
Interesante en dos o tres detalles como Jason Flemyng, ganándose una escena
para él sensacional, o el momento en el que las tornas vuelven a cambiar (Rab,
intentando entrar en casa, solo para ser incapaz de hacerlo), Amanece en
Edimburgo es un lujo de cinta sobre la familia, el amor y otras cosas. A ritmo
de The Proclaimers.
La Puntilla: Nunca deja de sorprenderme la capacidad que
tiene la tragedia para aparecer de golpe, sin esperarlo, y mandarlo todo al
carajo.
Mi
Valoración
★★★★★
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