15 AÑOS DEL INFIERNO EN REPETICIÓN
Uno de los elementos más
repetidos en La Noche de Halloween [Carpenter, 1978] como en las primeras
secuelas de la franquicia, son los quince años que Michael Myers pasó en un
psiquiátrico mirando una pared como si la pared no estuviese allí. Sin hablar,
sin comer, con los ojos en blanco, desde los tiernos seis años en que mata a su
hermana Judith hasta los 21 en los que se escapa del psiquiátrico {y ya hay que
mentalizarse y ponerse en ello para entenderlo} lo de Myers emerge como una
psicopatía criminal en estado puro, una mente sin atisbo de inteligencia tal y
como la raza humana así la concibe, y con un irrefrenable deseo de asesinar
como único pensamiento, que se repite una y otra vez en su cerebro. Porque como
muy bien André Linoge argumentaba en La Tormenta del Siglo [Craig R. Baxley,
1999], «el infierno es repetición». Y trasladado ese axioma al personaje de
Carpenter (hilando muy fino, todo sea dicho), lo que se obtiene como resultado
es un niño que, tras de cometer un espantoso crimen a una tierna edad, se tira
los siguientes tres lustros mirando al vacío reviviendo el mismo evento de
manera imparable, lejos de cualquier contacto social y afectivo que pudiera
refrenar esa espiral infinita donde la muerte de su hermana a sus manos,
haciendo de él el psicópata homicida por el que llega a ser conocido en la
colectividad tras su posterior fuga y nueva cadena de muertes. Y, aún siendo en
clave de ficción psicopática, Carpenter da en la diana retratando el
funcionamiento de una mente que ha perdido los asideros con la realidad de su
entorno, transformando no por azar a un niño de una clásica familia normal y
corriente en una bestia sanguinaria que, una vez ha probado la sangre y el
poder que ofrece matar, se convierte en un ser irredimible cuya vida gira
entorno a ello precisamente por estar la friolera de 15 años reviviendo día
tras día el asesinato de su hermana a sus manos.
Nº De Serie: NC/TCM/00709. Escrito Por: The Cineman.
Publicado El: Jueves, 2 de noviembre de 2017.
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