CULPABLES POR OBSESOS
En una época como los años 70 en
la que un grupo como de Rock’N Roll como K.I.S.S. (siglas de Knights Infernal
in Satan’s Service: “Caballeros Infernales al Servicio de Satán”) provocaba que
las madres de USA se unieran en contra de ellos por creerlos inmorales y
blasfemos (cómica, y a la vez, magníficamente retratado en Cero en Conducta
[Adam Rifkin, 1999]), La Noche de Halloween [John Carpenter, 1978] y Viernes 13
[Sean S. Cunningham, 1980] aparecieron justo para tomar el pulso a dicha
represión moralista y, bien parodiándola en formato de terror o bien tomándola
en serio, convertirla en la principal razón por la que los adolescentes
merecían ser asesinados por desear tener sexo sin antes estar casados. Una
mentalidad surgida en el mandato de Jimmy Carter que, potenciada tras la
llegada de Ronald Reagan a la Casa Blanca en 1981, provocó un aluvión de
secuelas tanto de la película de Carpenter como la de Cunningham, todas con dos
elementos en común: una serie de adolescentes y jóvenes con ganas de disfrutar
el sexo alegremente y sin moral alguna, y un sádico asesino en serie que (sin
llegar jamás a decirlo de una forma explícita y directa) se encargaba de
matarlos por ser una panda de obsesos sexuales a los que solo les importaba
encontrar a alguien con quien dar rienda suelta a sus instintos. Desde chicas
ligeras de ropa con cuerpos exuberantes a chicos a los que se les iban los ojos
como lobos por cualquier chica que se les cruzase en su camino, el terror de
los 80 se encontró con un filón inesperado a base de deseos sexuales cercenados
a golpe de machete, hachazo o de cualquier otra cosa que Michael Myers o Jason
Voorhees usasen para acabar con los que a ojos suyos merecían morir. Y es que
no hay nada mejor que un presidente ultraconservador y reaccionario para
desatar la polémica, a base de chicos y chicas muriendo en pantalla, culpables
sólo por ser unos obsesos.
Nº De Serie: NC/TCM/00713. Escrito Por: The Cineman.
Publicado El: Lunes, 6 de noviembre de 2017.
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