Criminalizar un Error

CRIMINALIZAR UN ERROR

 En un mundo perfeccionista y en excesivo cuadriculado, los errores se pagan como si de un crimen se tratase. Algo de lo que Brian Cullinan y Martha Ruiz, encargados de llevar por duplicado en dos maletas idénticas los sobres de los ganadores a los Óscars 2017 pueden dar buena fe, convertidos en el ojo de la polémica después que Warren Beatty, en un alarde de ingenio o prudencia, le pasara el muerto a Faye Dunaway y ésta diese erróneamente como ganadora a la película que no era. Una confusión monumental que lanza al aire aquel lejano dicho latín de “Humánum Errare Est”, «Errar es de humanos» pero con un trasfondo completamente distinto, en tanto los buenos de Cullinan y Ruiz no recibirán una palmadita con un condescendiente “No pasa nada, todos nos podemos equivocar a veces”, si no más bien un veto a perpetuidad por el que jamás volverán a pisar la ceremonia por donde antes paseaban codeándose con la élite de la élite, y suerte tendrán si por alguno de aquellos giros de la vida no terminan con algún tipo de cargo civil que les obligan a ir a juicio. Y es que, siendo como es uno de los focos de atención más mediáticos en todo el globo, en que cada detalle y anécdota es seguida con avidez por millones de fans, la Ceremonia de los Óscars jamás había sido empañada con un error tan flagrante a lo largo de sus 89 años de existencia. Y precisamente, en esa obsesión de la perfección que suele acompañar a los grandes eventos, meter la pata debería simplemente ser tomado como un lapsus en un mal momento que bien podría arrancar alguna carcajada de tomarse. El problema ocurre y sobreviene cuando, en vez de buscar la carcajada y minimizar el daño, lo que se hace es ponerse de morros y tomárselo por la tremenda, dándole un cariz que en otras circunstancias quizá no hubiese alcanzado. Porque en un mundo perfeccionista y cuadriculado, eso es lo que pasa al criminalizar un error.

 Nº De Serie: NC/TCM/00441. Escrito Por: The Cineman.

 Publicado El: Miércoles, 1 de marzo de 2017.

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