ROTOS POR DENTRO
Si por algo se caracteriza
Múltiple [M. Night Shyamalan, 2016], es por James McAvoy y su retrato de un
joven que, dividido en 23 personalidades distintas que viven dentro de él,
rapta a tres chicas con intenciones poco claras. Más allá del rapto de estas tres
jóvenes, lo que sobresale por encima de todo son los matices con los que Kevin
se desdobla en otros seres como Dennis, Hedwig y Patricia, cambiando
completamente su vestuario como su forma de hablar. Y es que el síndrome de
personalidad múltiple es un hecho real que no deja de desconcertar a
científicos y médicos que lo investigan, llegando a veces a extremos insólitos
como el caso de B.T., una mujer alemana que siendo ciega en su día a día,
recupera la vista durante uno de sus desdoblamientos en otra personalidad. Un
ejemplo de los extraños complejos mecanismos de la mente humana a la hora del
proceso de la formación de la personalidad, el cine ha abocado dicha enfermedad
a drama y thrillers como en Instinto Incontrolado [Stephen Gyllenhaal, 1996],
Identidad [James Mangold, 2003], Las Dos Caras de la Verdad [Gregory Hoblit,
1996] y en El Club de la Lucha [David Fincher, 1999], exhibiendo los {nunca
mejor dicho} múltiples peligros de una persona que, de pronto y sin entender
porqué, se convierte en otro ser diferente, sin tener recuerdos de sus acciones
previas. Algo que Robert Louis Stevenson ya plasmó magistralmente cuando
publicó en 1886 El Extraño Caso del Dr. Jekyll y el Sr. Hyde, y de lo que el
séptimo arte se ha nutrido con mayor o menor fortuna (así como la TV),
volviendo a poner de relieve una enfermedad que es difícil y hasta incómoda de
aceptar para algunos, en el doloroso recuerdo de que la mente, en esos
laberintos de neuronas y química, late algo que puede surgir de los abismos del
alma humana. Porque si algo desconcierta al mundo, son los complejos mecanismos
a la hora de la formación de la personalidad.
Nº De Serie: NC/TCM/00416. Escrito Por: The Cineman.
Publicado El: Lunes, 6 de febrero de 2017.
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