Vista En: Cines Odeón (Corvera), sábado 24 de diciembre
de 2016.
Título Original: Collateral Beauty.
Director: David Frankel.
Guión: Allan Loeb. Género: Drama.
Música: Theodore Shapiro. Fotografía: Maryse Alberti.
Decorados: Kara Zeigon. Vestuario: Leah Katznelson.
Productoras: PalmStar Media, Likely Story, Anonymous
Content, Overbrook Entertainment y Village Roadshow Pictures. Presupuesto: ±36.000.000 $.
País: USA. Año: 2016. Duración: 97 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Will Smith
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Howard
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Edward Norton
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Whit
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Kate Winslet
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Claire
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Michael Peña
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Simon
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Helen Mirren
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Brigitte/La Muerte
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Keira Knightley
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Amy/El Amor
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Jacob Latimore
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Raffi/El Tiempo
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Naomie Harris
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Madeleine
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Ann Dowd
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Sally Price
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Liza Colón-Zayas
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Madre de Trevor
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Natalie Gold
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Madre de Adam
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Kylie Rogers
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Allison
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Howard es un diseñador traumatizado por la
muerte de su hija, dos años atrás. Whit, Claire y Simon, sus amigos y
compañeros de trabajo, se deciden a contratar a tres actores para que finjan
ser la Muerte, el Amor y el Tiempo, a los que Howard les ha escrito unas
cartas, para hacerle reaccionar y que de ese modo evite que él y los demás
pierdan su medio de vida.
Crítica: Emotivo melodrama en el que el director de El
Diablo Viste de Prada [2006] y Si de Verdad Quieres... [2012] fabula una
historia sobre la pérdida y la redención con un reparto de quitar el hipo pero
con un guión que juega en exceso a enrevesar lo sencillo de su premisa básica,
alcanzando unos niveles de confusión en que las ideas acaban del revés y cabeza
abajo (Brigette, Amy y Raffi, tres actores contratados para hacerse pasar por
la Muerte, el Amor y el Tiempo, pero que a la hora de verdad parecen estar “demasiado”
metidos en su papel; las charlas entre Whit, Claire y Simon, tres amigos y
ejecutivos que buscan salvar su empresa a costa de que Howard supere la pérdida
de su hija: ¿nadie vio lo desalmado y poco emotivo que resultaba la idea
expuesta en frío?; el trabajo de todos, desde Mirren y Winslet, hasta
Knightley, Peña y Lattimore, compensando y para bien sus defectos narrativos;
Madeleine, una mujer que dirige un grupo de apoyo para gente que ha perdido
hijos, de una sensibilidad y ternura conmovedoras). Sobria en su contenido como
fotografía y banda sonora, que cumplen sus expectativas sin destacar en exceso,
Belleza Oculta, extraña traducción del “belleza colateral” original, es una
película no deslucida al 100%, pero sí emotiva en su mensaje a pesar de su
extraña forma de contar la historia (Howard, un hombre en un perpetuo estado de
depresión y abatimiento: un curioso paralelismo con la carrera del propio Will
Smith; la reunión de trabajo entre Howard y los demás, viéndose unos videos, en
donde lo del efecto digital se antoja muy traído por los pelos; la obsesión de
Howard por montar enormes figuras con fichas de dominó). Buscando meter un par
de mensajes solapados (los ya citados encuentros de Howard con Muerte, Amor y
Tiempo; las historias de Whit, Claire y Simon), pero incapaz de escapar de la
sensación de ser innecesariamente engañosa. Lo del puente lo prueba.
La
Puntilla: En una sociedad
que niega la muerte, también se acaba negando la vida. El resultado: gente que
no sabe ni vivir ni tampoco morir.
Mi
Valoración
★★★★★
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