“Criticaen25” es un punto de encuentro para todos los cinefilios, habitantes del séptimo planeta del sistema solar de las artes. Una propuesta amena y divertida a la par que abierta al debate y a la reflexión en la que, tan diariamente como sea posible, se irán comentando películas de todos los tiempos, con independencia de su género o fama. Un lugar en donde relajarse y disfrutar de un rato agradable en buena compañía.

Una Pequeña Gran Contribución al Cine

UNA PEQUEÑA GRAN CONTRIBUCIÓN AL CINE


 Richard Harrison no fue lo que se puede decir un actor famoso ni tampoco de esos que la historia recuerda con esplendor. Su carrera discurrió con bastante discreción en los 50 y 60 en ínfimos spaghetti westerns de serie B con menos argumento que una película porno, alguna que otra película de intriga, y allá por los 80 alcanzó cierta popularidad en Hong Kong por una serie de películas de ninjas que protagonizó, no sin cierto escándalo debido a una manipulación indebida de las mismas, sin su consentimiento. Su contribución al cine, por tanto, parece más bien una menudencia que otra cosa...salvo si se tiene en cuenta un papel que, en vez de aceptar, decidió rechazarlo, y proponer a un amigo suyo para que la hiciera. Porque ese amigo se llamaba Clint Eastwood, y la película en donde actuar, Por un Puñado de Dólares [Sergio Leone, 1964]. En un universo donde todo está relacionado y cada pequeño acto puede dar como resultado otro mucho mayor, el que musculoso de Richard Harrison se apartase del camino fue el hueco que necesitaba Eastwood para atraer toda la atención del mundo sobre él, iniciando una carrera en cine más allá de su serie de TV Látigo [1959], y provocando la aparición de uno de los iconos más grandes de la historia del cine, capaz de dar el salto de la interpretación a la dirección para revelarse como un icono aún más grande. Y todo ello, porque alguien tomó una sencilla decisión, un simple cambio de parecer tan mínimo como el cara o cruz de arrojar una moneda y dejar que ella decida. El cine no carece de esta clase de hechos fortuitos pero, sin duda alguna, muy pocas tan transcendentes a todos los niveles como la de Richard Harrison. Si él hubiera hecho la peli, Clint Eastwood no habría saltado al estrellato, y tal vez nunca hubiera hecho carrera en cine (o la hubiera hecho de otro modo distinto). Eso es lo que tienen las menudencias: que a veces pueden cambiarlo todo.

 Nº De Serie: NC/TCM/00120. Escrito Por: The Cineman.
 Publicado El: Domingo, 24 de julio de 2016.

 Valora el artículo

No hay comentarios:

Publicar un comentario