EL HUMOR EN PAREJA
A finales del siglo XIX, dos
payasos revolucionaron la escena del circo con un show que rompió el esquema
del humorista en solitario siendo la estrella del momento (un hecho que fue
reflejado en la cinta Monsieur Chocolat [Roschdy Zem, 2015]). El cine dio buena
cuenta de ello, y allá en los albores del siglo XX, Stan Laurel y Oliver Hardy,
conocidos como “el Gordo y el Flaco”, fueron la primera pareja cómica del
séptimo arte, secundados en los años 50 por Lou Abbott y Bud Costello, en una
dualidad que se llevaría a la animación con el oso Yogi y Bubu, Pepe Pótamo y
Soso, Leoncio el león y Tristón, Tom & Jerry y un largo etc. Desde entonces
y cada cierto tiempo, la estela del dúo cómico se reaviva para volver a la
palestra y sacar la sonrisa al público: bien uno alto y otro bajito, bien uno
delgado y uno gordo, o uno gruñón y el otro inocentón (Mortadelo y Filemón,
mismamente), el humor en pareja resulta un recurso al que raramente uno puede
resistirse, en especial cuando la química funciona incluso mejor de lo
esperado. No solo son los dueños de los mejores instantes de una película, si
no que poseen un rasgo único: que nunca mueren. Siempre les sucederá de todo
pero al mismo tiempo nunca les sucederá nada, pues sin ellos el show pierde su
encanto. En los 70 R2D2 y C3PO se convirtieron en un icono para millones de
niños y no tan niños, y en la saga de Piratas del Caribe Pintel y Ragetti
volvieron a encender la antorcha robando cada plano gracias a un humor de risa
fácil. Descontando como honrosa excepción a George y Fred Weasley en la última
entrega de Harry Potter, el dúo cómico tiene como misión estar uno junto al
otro para hacer reír incluso cuando esto conlleva llevar el peso de la trama.
Porque si el dúo se separa, la magia se rompe. Y si la magia se rompe, entonces
las risas dejan de sonar. Y si no, que se lo digan a Merry y Pippin en El Señor
de los Anillos: El Retorno del Rey.
Nº De Serie: NC/TCM/00109. Escrito Por: The Cineman.
Publicado El: Sábado, 16 de julio de 2016.
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