EL BIGOTITO RIDÍCULO (O NO)
Es con toda probabilidad la
persona que mejor definió el concepto de mal en el siglo XX. Él y su bigotito a
lo Charles Chaplin fueron la inspiración para sus fieles devotos y el objetivo
de unos enemigos que estaban locos por abatirle. Adolf Hitler, figura
controvertida donde las haya, he sufrido una suerte muy desigual en los medios,
digna de un exhaustivo análisis de estudio. Una figura cuyo halo magnético
sigue ejerciendo la misma influencia a pesar de los años transcurridos tras su
muerte, capaz por una parte de ser la víctima de las más tropelías más salvajes
que se puedan imaginar (como en Little Nicky [Steven Brill, 2000], saliendo
vestido de criada con cofia y todo, sufriendo un castigo infernal bastante
doloroso), o por otra de ser objeto de una película sobre sus años de esplendor
y caída, como El Hundimiento [Oliver Hirschbiegel, 2004]. Eje ventral de todo
un imperio que se las prometía iba a durar 1000 años, el poder Hitler para
desatar sentimientos encontrados no se ha quedado dentro de la realidad, si no
que también se ha llevado a la pantalla desde todos los ángulos posibles y
hasta imposibles, animación incluida (el cortometraje Blitz Wolf [Tex Avery,
1942], una obra maestra a pesar de su mensaje claramente paródico y
propagandístico). Ya fuese secundario en algunos títulos de la talla de
Valkiria [Bryan Singer, 2008] y Max [Menno Meyje, 2002], o protagonista en
otras películas o miniseries como Hitler: El Reinado del Mal [Christian Duguay,
2003], Hitler y su enigma son tan extrañamente cautivadores como lo eran en la
época en que estaba vivo. Porque, más allá de la crueldad de sus actos, el que
llegase a crear un gobierno de terror y odio tras ser elegido por votación por
el propio pueblo alemán es tan frustrante como desconcertante. Y, más allá de
su figura histórica, su segunda vida como figura cinematográfica ha dado mucho
de sí. Incluso con ese bigotito a lo Charles Chaplin.
Nº De Serie: NC/TCM/00112. Escrito Por: The Cineman.
Publicado El: Lunes, 18 de julio de 2016.
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