5 Segundos (y Casi 30 Años) de Miradas

5 SEGUNDOS (Y CASI 30 AÑOS) DE MIRADAS

 Durante su discurso final en Adivina Quién Viene Esta Noche [Stanley Kramer, 1967], un avejentado pero brillante Spencer Tracy comparte cinco segundos de miradas con Katharine Hepburn, paralizándose breve pero crucialmente la película. No faltaban razones para ello: encontrándose por primera vez en La Mujer del Año [George Stevens, 1942] y trabajando en ocho películas más en aproximadamente 30 años, el suyo fue uno de esos romances que más ríos de tinta hizo correr tanto dentro como fuera de la gran pantalla. Dominado por un férreo catolicismo que le impedía divorciarse de Louise Ten Broeck, Tracy y Hepburn tuvieron que hacer frente al sentimiento de culpa y al alcoholismo del actor como a los mentideros de un Hollywood que se escandalizó ante la clase de relación que había entre ambos, siendo como era un hombre casado en una época tan represiva como era aquella. Algo que no impidió que en los casi 30 años en que vivieron su romance los dos actores disfrutasen del amor que había entre ambos, y de la frustración por parte de Hepburn a sabiendas que jamás podría casarse con él. Una situación que no hizo más que sacar a relucir prejuicios, hipocresías y cinismos sociales a relucir con la facilidad con que Matt Drayton, el personaje de Tracy, discurría del amor y de la cerrazón que precede a la intolerancia y al odio. Un discurso cuyas lágrimas por parte de Hepburn en esa escena no estaban en el guión, y que estaban ahí por dos razones: el amor y los años que ambos habían compartido, y que ella sabía lo mal que Spencer Tracy estaba por una congestión pulmonar (que una semana después de terminar el rodaje le mataría por un ataque al corazón derivado de ella, no pudiendo verla estrenada). De ahí que, cuando Tracy y Hepburn se miran en esos breves cinco segundos, es perfectamente comprensible que de pronto toda la película se paralizase. No faltaban razones para ello.

 Nº De Serie: NC/TCM/00647. Escrito Por: The Cineman.

 Publicado El: Domingo, 3 de septiembre de 2017.

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