Vista En: Telecinco, viernes 9 de abril de 1993.
Título Original: The First Power.
Director: Robert Resnikoff.
Guión: Robert Resnikoff. Género: Terror.
Música: Stewart Copeland. Fotografía: Theo Van de Sande.
Decorados: Jerie Kelter. Vestuario: Tom D’Arcy.
Productoras: Interscope Communications y Nelson
Entertainment.
Presupuesto: ±10.000.000 $.
País: USA. Año: 1990. Duración: 98 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Lou Diamond Phillips
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Russell Logan
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Tracy Griffith
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Tess Seaton
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Jeff Kober
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Patrick Channing
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Mykelti Williamson
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Detective Oliver Franklin
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Elizabeth Arlen
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Hermana Marguerite
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Dennis Lipscomb
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Comandante Perkins
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Carmen Argenziano
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Teniente Grimes
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Julianna McCarthy
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Abuela
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Nada Despotovich
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Bag Lady
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Sue Giosa
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Carmen
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Clayton Landey
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Mazza
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Hansford Rowe
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Padre Brian
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Russell Logan es un detective de Los Ángeles
obsesionado con el Asesino del Pentagrama. Logrando dar con él y condenado a
muerte, nuevos crímenes ocurridos después de su muerte hacen que Logan reciba
la visita de una vidente, Tess Seaton, quien le revela una terrible verdad:
Satanás le ha dado al asesino el poder de volver de la muerte para seguir
matando.
Crítica: Ópera prima de Robert Resnikoff quien después
de su cortometraje El Corredor [1988] se lanza a la gran pantalla con una
insólita mezcla entre el cine policíaco y el de terror con una pareja de
antagonistas desparejada con todas las de la ley, y con una pátina de película
para TV que hace de lo raro de su premisa un espectáculo al servicio de sus
estrellas principales (Logan, un detective metido en el caso de su vida: su
hallazgo de un cadáver bajo un puente es cuando menos, de verdadero vértigo por
la altura a la que éste se halla; Kober, uno de esos actores cuya fisonomía va
como anillo al dedo para crear a cuantos villanos se le crucen en su camino: su
retrato de Channing es puro estereotipo de maldad por el mero placer de ser
malo; la visita de Logan y Seaton a casa de la abuela de Channing, en donde la
videncia de Seaton se sirve como recurso para conocer un terrible secreto
familiar). Mentando a un par de secundarios que están entre efectivos y
convencionales en sus papeles como Williamson, Lipscomb y Argenziano, y sacando
todo el partido posible a Los Angeles como personaje extra (¿acaso existe mejor
enclave para un guión sobre religión y Satanás que la ciudad californiana?), La
Noche del Diablo, una perdidísima traducción de su original “El Primer Poder”,
se erige como una diversión sin mayores alicientes que un juego del gato y el
ratón con tintes sobrenaturales de por medio, sorprendente a veces, e
intrigante en otras (la escena de la iglesia, con Channing saltando por encima
de Logan...a varios metros del altura; la hermana Marguerite, cogiendo una
reliquia católica de su congregación en su intento de ayudar a Logan; el final,
una copia {más o menos} de La Profecía [Richard Donner, 1976]. Entretenida pero
con un punto algo inverosímil (¿Satanás dando poderes así por capricho?), el
film no pasa de ser un quiero y no puedo, decente pero bastante desaprovechado.
La Puntilla: Hay películas más interesantes por su forma de captar una era y unas modas concretas que por su historia. Esta es una ellas.
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