Vista En: Cines Los Prados (Oviedo), sábado 19 de
agosto de 2017.
Título Original: The Dark Tower.
Director: Nikolaj Arcel.
Guión: Akiva Goldsman, Jeff Pinkner, Anders Thomas
Jensen y Nikolaj Arcel, basado en la novela homónima de Stephen King, publicada
en 1998. Género: Fantástico.
Música: Junkie XL. Fotografía: Rasmus Videbæk.
Decorados: Rosemary Brandenburg, Anneke Botha y Jo
Stuart Fox.
Vestuario: Trish Summerville.
Productoras: Sony Pictures Entertainment, Media Rights
Capital, Imagine Entertainment y Weed Road Pictures. Presupuesto: ±60.000.000 $.
País: USA. Año: 2017. Duración: 95 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Idris Elba
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Roland Deschain
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Matthew McConaughey
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Walter Padick ‘El Hombre de Negro’
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Tom Taylor
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Jake Chambers
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Dennis Haysbert
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Steven Deschain
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Claudia Kim
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Arra Champingnon
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Jackie Earle Haley
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Sayre
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Fran Kranz
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Pimli
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Abbey Lee
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Tirana
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Katheryn Winnick
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Laurie Chambers
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Nicholas Pauling
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Lon
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Michael Barbieri
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Timmy
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José Zúñiga
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Dr. Hotchkiss
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Jake Chambers es un chico que tiene sueños
recurrentes con un hombre de negro y una enorme torre negra en el cielo.
Buscando respuestas a sus sueños y huyendo de los que cree los esbirros del
hombre de negro, llega a otro planeta donde conoce a Roland Deschain, el último
pistolero, que vive para matar al Hombre de Negro y evitar que destruya la
Torre Oscura.
Crítica: Tremendísima pero a la vez floja compilación
de la saga de novelas de King en un remix deslavazado con un trío actoral
realmente encomiable pero metidos en una no-progresión narrativa que deja todo
en el aire de mala manera, haciendo de la cinta un revuelto de ideas sin
sentido ni objetivo (los secuaces de Padick o los escasísimos trazos del Mundo
Medio, sugerente pero tan nulamente contadas que son frustrantes; el propio
Padick y sus razones para destruir la Torre Oscura, dejadas el éter: pese a que
McConaughey está genial, acaba derrapando al cliché más sobreactuado; Deschain,
un antihéroe en busca de venganza: ¿un vaquero de otra dimensión intentando
matar a un brujo a base de balas?). Desaprovechando a gente como Katherine
Winnick o Jackie Earle Haley y metiendo a calzador elementos que se antojan
extraños e innecesarios, el director de La Isla de las Almas Perdidas [2007] y
Un Asunto Real [2012] hunde su propia nave torpedeándola en todo momento,
metiendo banalidades interesantes pero vagueando en lo importante, yéndose ella
sola por la pendiente del sinsentido (Jake y su visita a una casa abandonada
cuyo suelo de pronto se pone extrañamente juguetón; algunas panorámicas como la
de la Torre o algunos cielos extraterrestres, entre bonito y evocador, pero de
ahí no pasa; la visita de Deschain y Jake a la Tierra, plagada de chistes sin
gracia y con pasajes de idiotez supina como lo del bus). Una película sin alma
ni entidad propia con momentos dolorosos de necesidad (Jake, descubriendo lo
que ha pasado al volver a casa; el tema de los niños y el “resplandor”, otro
detalle descolgado por las bravas) que confirma la necedad de un Hollywood que
ha perdido el rumbo en materia de adaptaciones, sacrificando identidad y
dramatismo por una descarnada y extrema comercialidad. Una total pérdida de
esfuerzo y dinero, lamentable y penosa hasta límites inimaginables.
La Puntilla: Punto 1: los vaqueros en el cine están
obsoletos. Punto 2: ¿quién coño quiere ver a Matthew McConaughey de malo?.
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