Publicado El: Viernes, 13-Oct-2017. Nº De Serie: C25/TCM/0002265.
Vista En: 13 TV, jueves 12 de octubre de 2017.
Título Original: La Vingt-Cinquième Heure.
Director: Henri Verneuil.
Guión: Henri Verneuil, François Boyer y Wolf
Mankowitz, basado en la novela homónima C. Virgil Gheorghiu, publicada en 1949. Género: Drama.
Música: Georges Delerue. Fotografía: Andreas Winding.
Decorados: Pierre Charron. Vestuario: Rosine Delamare.
Productoras: Metro-Goldwyn-Mayer, Carlo Ponti Production,
Avala Film, Les Films Concordia y Compagnia Cinematografica Champion.
Presupuesto: [Desconocido].
Países: Francia, Italia y Yugoslavia. Año: 1967. Duración: 130 minutos. Color.
Reparto:
|
Personajes:
|
Anthony Quinn
|
Johann Moritz
|
Virna Lisi
|
Suzanna Moritz
|
Grégoire Aslan
|
Dobresco
|
Michael Redgrave
|
Abogado defensor
|
Marcel Dalio
|
Strul
|
Jan Werich
|
Sargento Constantin
|
Harold Goldblatt
|
Isaac Nagy
|
Alexander Knox
|
Abogado Fiscal
|
Liam Redmond
|
Padre Koruga
|
Meier Tzelniker
|
Abramovici
|
Kenneth J. Warren
|
Inspector Varga
|
John Le Mesurier
|
Presidente del Tribunal
|
(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Durante la Segunda Guerra Mundial Johann
Moritz, un granjero de un pequeño pueblo de Rumanía, es denunciado falsamente
como judío y enviado a un campo de concentración. Fugándose a Hungría, es
nuevamente apresado y enviado a Alemania, donde un oficial nazi lo señala no
como judío si no como un ario, haciendo de él un reclamo para el Tercer Reich.
Crítica: El autor de otras películas como Nosotros los
Gánsgters [1959] y Los Leones Andan Sueltos [1961] firma un alegato
anti-belicista cuyo contenido lo convierte en una tragicomedia negra que
denuncia en más de una ocasión los azotes y peores instintos de la humanidad,
haciendo un ejercicio de reflexión en la persona de un impresionante Anthony
Quinn convertido a su pesar en el protagonista de unas circunstancias donde
cabe de todo (su interpretación de Johann Moritz, arrebatadora, un hombre de
campo tan limitado en cuanto a inteligencia y capacidad de análisis como
ilimitado en humildad y en bondad natural; su arresto bajo acusación de ser
judío, únicamente por el frustrado intento del policía que lo denuncia de
propasarse con Suzanna, una Virna Lisi realmente estupenda; su encuentro con
los soviéticos, físicamente doloroso y moralmente repugnante por el trato
recibido). Correcto en la banda sonora de Georges Delerue como notable en la
recreación de su puesta en escena, La Hora 25 es un largometraje tan mordaz de
contenido como al mismo tiempo conmovedor, sacando toda la artillería pesada de
principio a fin y trabajando el guión de una manera excepcional para incluso en
el momento más sencillo resultar deslumbrante (Moritz, soltando una lagrimita
tras escuchar una carta de su esposa: sin palabras; su acto final en una
estación de tren, en donde lo reconciliador se funde con lo amargo a cotas
estratosféricas; la frase “No sé qué hago aquí en los últimos ocho años”, de
una simplicidad que apela al lado más humano del espectador). Una cinta que
convierte sus poco más de dos horas de metraje en un verdadero tour-de-force,
desbordante de calidad en una fotografía que está a la altura de un
excesivamente breve pero fantástico Michael Redgrave, y cuya pátina hace de
ella un mazazo de hasta qué punto el mal hace de las suyas. Hasta en algo tan
simple como unas fotos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario