Vista En: Tele 5, sábado 18 de abril de 1998.
Título Original: Days of Thunder.
Director: Tony Scott.
Guión: Robert Towne, basado en una historia original
de Robert Towne y Tom Cruise. Género: Drama.
Música: Hans Zimmer. Fotografía: Ward Russell.
Decorados: Thomas L. Roysden. Vestuario: Susan Becker.
Productoras: Don Simpson/Jerry Bruckheimer Films y
Paramount Pictures.
Presupuesto: ±60.000.000 $.
País: USA. Año: 1990. Duración: 107 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Tom Cruise
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Cole Trickle
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Nicole Kidman
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Dra. Claire Lewicki
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Robert Duvall
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Harry Hogge
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Randy Quaid
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Tim Daland
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Cary Elwes
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Russ Wheeler
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Michael Rooker
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Rowdy Burns
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Fred Dalton Thompson
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Big John
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John C. Reilly
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Buck Bretherton
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J.C. Quinn
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Waddell
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Don Simpson
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Aldo Bennedetti
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Caroline Williams
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Jennie Burns
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Donna Wilson
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Darlene
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Cole Trickle es un joven amante del riesgo y
de la emoción que se mete en el mundo de la competición de coches. Ayudado por
el veterano Harry Hogge, busca ganar el campeonato de Daytona 500, pero un accidente
le deja afectado a él y a su rival Rowdy Burns, perdiendo su confianza en si
mismo, debiendo hallar el modo de vencer a su sustituto Russ Wheeler.
Crítica: Reunión de Tony Scott con Tom Cruise después
del tremendo exitazo de Top Gun (Ídolos del Aire) [1986], cambiando el entorno
de la aviación por la competición sobre cuatro ruedas, en la que se repiten
todos los elementos de la otra película para darle algo de ambiente y con un
Cruise eficiente pero algo ensombrecido gracias al gran trabajo del veterano Robert
Duvall, quien sabe cómo y cuando apropiarse del protagonismo (la fotografía de
la película con esos cielos recargados y algo rojizos, así como el vestuario de
algunos de sus personajes; Harry, discutiendo con Cole sobre la posibilidad de
volver a pilotar coches, sacando todo cuanto ambos llevan dentro; la extraña
relación de amistad/enemistad entre Cole y Rowdy, que parece un homenaje a la
que se tenían entre si James Hunt y Niki Lauda en los años 70). Nicole Kidman,
en la única presencia que consigue aliviar tanta testosterona reunida de una
sola vez, añade carisma y belleza a una trama sin demasiadas complicaciones en
su premisa pero sí en su progresión narrativa, abriendo varios frentes en tono
de comedia y al mismo tiempo de drama, sin perder un solo segundo un gran
componente estético que refleja el cambio de década entre los 80 y los 90 (el
primer encuentro entre Cole y Lewicki, en que Cole la toma por algo que no es:
imposible no reírse con su metedura de pata; su discusión sobre controlar lo incontrolable,
pequeña pero certera; la entrada en escena de Wheeler, en que Cary Elwes
abandona las bondades de La Princesa Prometida [Rob Reiner, 1987] para
convertirse en un trepa con ansias de ganar sin importar el modo). Días de
Trueno, por méritos propios, se erige como otra película-manual para aprender
un oficio, perfecta punto por punto en dicha materia, como a su vez en una
velada con la que gozarlo viendo a Cruise ejerciendo por enésima vez su papel
de chico dorado de Hollywood. Y más no se lo puede pedir.
La Puntilla: ¿Un piloto de carreras que sabe conducir pero
es un ignorante en cuanto a cómo funciona un coche?. ¿Y aún así le dejan
participar?.
Mi
Valoración
★★★★★
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