Publicado El: Domingo, 17-Ene-2016. Nº De Serie: C25/TCM/0000356.
Vista En: Cines Odeón (Corvera), jueves 14 de enero de
2016.
Título Original: Fathers and Daughters.
Director: Gabriele Muccino.
Guión: Brad Desch. Género: Drama.
Música: Paolo Bounvino. Fotografía: Shane Hurlbut.
Decorados: Julie Smith. Vestuario: Isis Mussenden.
Productoras: Andrea Leone Films, Busted Shark Productions, Fear of God Films y Voltage Pictures. Presupuesto: ±22.400.000 $.
Productoras: Andrea Leone Films, Busted Shark Productions, Fear of God Films y Voltage Pictures. Presupuesto: ±22.400.000 $.
País: USA e Italia. Año: 2015. Duración: 116 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Amanda Seyfried
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Katie (adulta)
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Kylie Rogers
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Katie (niña)
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Russell Crowe
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Jake Davis
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Aaron Paul
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Cameron
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Bruce Greenwood
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William
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Diane Kruger
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Elizabeth
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Octavia Spencer
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Dra. Korman
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Quvenzhané Wallis
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Lucy
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Jane Fonda
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Teddy Stanton
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Ryan Eggold
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John
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Janet McTeer
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Carolyn
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Michelle Veintimilla
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Michelle
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Katie Davis es una joven traumatizada por los
recuerdos de su padre, un escritor ganador del premio Pulitzer quien tuvo un
colapso nervioso tras quedarse viudo. 27 años después, ya como adulta, intenta
reconducir su vida con su propio pasado al mismo tiempo que intenta salvar su
relación con su novio Cameron, marcada precisamente por esos traumas.
Crítica: Autor de En Busca de la Felicidad [2006] y Un
Buen Partido [2012], el italiano Muccino dirige una historia con un marcado
acento de drama humano y tragedia, con un reparto ajustado pero muy ecuánime en
su registro actoral para matizar a sus personajes (Jake y Katie, una relación
padre-hija que roba el corazón a lo largo de la película; Bruce Greenwod, en
principio agradable y luego ya no tanto; Diane Kruger, haciendo justo lo
contrario: dos elecciones muy bien escogidas). Relato de castigo y redención
que toma Nueva York de telón de fondo, por cuyas calles se mueven historias a
veces de lo más tristes y a veces algo más alegres, equilibrando la balanza
para evitar aburrimientos (Quvenzhané Wallis, olvidándose de las canciones de
Annie [Will Gluck, 2014] para dejar bien claro que sabe ser actriz de verdad;
Aaron Paul, haciendo de Cameron el perfecto yerno que toda madre desearía para
su hija; los ataques epilépticos de Jake, que sobrecoge el corazón por su cruda
intensidad). Una película de sentimientos encontrados en donde pasado y
presente están de un modo u otro siempre en movimiento, dejando una huella a
veces difíciles de olvidar (Katie, derrumbándose ante una tocadiscos de un bar;
Jake y Teddy, maravillosa aunque poco aprovechada Jane Fonda, hablando sobre
las críticas de su nuevo libro; los esfuerzos de Cameron por entender a Katie).
Aunque se podría decir que el elemento emocional es casi un problema por lo
conflictivo o almibarado de sus descripciones, Muccino toma las riendas de un
guión que permite sus artistas principales sacar lo mejor de ellos mismos,
evitando caer en la sobreactuación (Katie, cometiendo un error gordo: sin que
se vea nada su cara lo dice todo). Un excelente producto donde cada pieza está
colocada y ensamblada en su lugar para dar una lección vital sobre pasados y
traumas. Todo aunado en una bella, torturada y deslumbrante Amanda Seyfried.
La Puntilla: Es sorprendente como a veces amor y dolor
pueden ir cogidos de la mano para hacer de una vida feliz un infierno
emocional.
Mi
Valoración
★★★★★
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