Publicado El: Jueves, 17-Dic-2015. Nº De Serie: C25/TCM/0000311.
Vista En: Cines Los Prados (Oviedo), domingo 15 de
marzo de 2015.
Título Original: Outcast.
Director: Nick Powell.
Guión: James Dormer. Género: Acción.
Música: Guillaume Roussel. Fotografía: Joel Ramson.
Decorados: Ping Du y Zhou Gouquan. Vestuario: Yongfeng Zhu y Yongzhong Zhu.
Productoras: Notorious Films, Canal+, Media Max
Productions, Yunnan Film Group y 22h22. Presupuesto: ±25.000.000 $.
Países: Canadá, China, USA y Francia. Año: 2014. Duración: 99 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Hayden Christensen
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Jacob
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Nicolas Cage
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Gallain
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Bill Su Jiahang
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Zhao
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Yifei Liu
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Lian
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Coco Wang
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Xiaoli
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Andy On
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Shing
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Fernando Chien
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Wu
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Anoja Dias Bolt
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Anika
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Jike Junyi
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Mei
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Fernando Chien
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Capitán Wu
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Byron Lawson
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Capitán Peng
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Xu Wei
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General Gao
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Jacob es un guerrero de las Cruzadas viaja
por China intentando olvidar su pasado. Por casualidad conoce a Zhao y Lian,
los hijos del rey, que intentan huir de su hermano mayor Shing, que tras
asesinar a su padre se ha apropiado del trono y busca el sello imperial. Los
tres juntos huyen buscando refugio, intentando localizar a un famoso bandido,
el Fantasma Blanco.
Crítica: Azaroso y desafortunado largometraje que
junta a dos protagonistas en sus horas más bajas (Nicolas Cage, repitiendo los
histrionismos que parecía haber superado con Joe [David Gordon Green, 2013], y
un Hayden Christensen que parece haberse pasado todo el rodaje de resaca
perpetua) con un guión que hace aguas desde el minuto uno. Tras un prólogo que
solo evidencia una falta de medios (la batalla en las cruzadas, que recuerda
irremediablemente a otro film de Cage, En Tiempo de Brujas [Dominic Sena,
2011]), su trama se pierde en escenas típicas y tópicas, vistas una y mil veces
antes, amén de una narración que va desinflándose en aras de la mediocridad
(Shing, un villano de manual, todo cliché y sobreactuación: la charla con su
padre o la siempre inevitable escena de entrenamiento lo demuestran). Del mismo
modo, repite ideas de forma sistemática, con resultados risibles (Jacob,
enseñando a Zhao a disparar con arco y flechas; la pelea en el bar, sacada de
El Séptimo Hijo [Sergey Bodrov, 2014]: ¿por qué siempre el héroe tiene que
pelear estando borracho para probar que pega mejor que nadie?), pero que a
veces se salta toda barrera de lógica y sentido común (como la del idioma, que
en el film ni se dice: ¿acaso los templarios hablan un perfecto chino mandarín,
o los chinos hablan inglés?). Su música y su fotografía apenas destacan,
limitándose a ser meramente funcionales (el palacio del rey, la taberna o la montaña
plateada sirven como ejemplos) como tampoco lo hace su reparto de actores (de
nuevo Cage, luciendo la que tal vez sea la cicatriz facial más imposible de
creer en mucho tiempo), que se limitan a cumplir con el estereotipo asignado.
Pese a instantes encomiables (el discurso de Lian sobre las mujeres, actual de
todo punto), su clímax, y por ende la película, dejan el amargo sabor de la
serie B hecha con total desgana y apatía. Fácil de ver. Más aún de olvidar.
La Puntilla: De sables de luz a espadas medievales. Al final
la cabra siempre tira hacia el monte.
Mi
Valoración
★★★★★
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