Una Música Digna de ser Recordada

UNA MÚSICA DIGNA DE SER RECORDADA

 En algunos casos, su autoría permanece en el misterio para el gran público. Y en otros, incluso para el público minoritario y especializado en el género. Aún así, es imposible no romper una lanza por la banda sonora de las vidas de los que en su día fueron niños y/o adolescentes, y estuvieron allí para vivir uno de los fenómenos más revolucionarios de finales del siglo XX: los videojuegos. Desde consolas como Atari, la Commodore 64 o la primera Nintendo (la de los 8 bits), la sintonía de sus videojuegos, minimalistas por las limitaciones de la época, poseían (y siguen poseyendo) el encanto de ser las pioneras, primeras en un verdadero terremoto social que los años transformaron de una manera tan sorprendente como rápida. Una música que por razones obvias sufre una enorme transformación cuando el videojuego es llevado al cine, impidiendo a ésta lucir en su sintonía original, perdiéndose por el camino. Olvidada por las generaciones subsiguientes, pero reivindicada a posteriori como algo vintage y como objetos de verdaderos coleccionismo, los antiguos videojuegos como el legendario Super Mario Bros. [1985], el primer The Legend of Zelda [1986] y arcades para las antiguas salas recreativas como Ghouls’N Ghosts [1988] y el Final Fight [1989], entre una ingente cohorte de ellos, acompañaron tardes y noches de una juventud que descubría un nuevo mundo repleto de fantasía y aventuras (transformado y para mal años después en violencias gratuitas al estilo de las sagas Battlefield [2002] y Call of Duty [2003]). Una fantasía que estaba coronada con una serie de músicas y sintonías que evocan de manera inevitable a unos años y a un mundo desaparecido, en el que la inocencia de un fontanero aplastando setas se ha reemplazado por arsenales de armas y conflictos bélicos, y que por desgracia el cine nunca permitirá que se escuche tal y como se concibió cuando el juego sea llevado a la gran pantalla.

 Nº De Serie: NC/TCM/00379. Escrito Por: The Cineman.

 Publicado El: Miércoles, 4 de enero de 2016.

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