EL ASESINO QUE SURGIÓ DEL FRÍO
Tuvo que llegar una mente como
la del malogrado Stieg Larsson para poner en el mapa a la antigua Escandinavia
(Noruega, Sueca y Finlandia) y llevarla al siglo XXI más allá de sus míticos
vikingos y sus leyendas de elfos y dioses. Aunque previamente series como
Wallander [2005] ya se habían acercado al tema de los crímenes en los países
nórdicos, la trilogía del escritor sueco que se conforma por Millennium 1: Los
Hombres que no Amaban a las Mujeres [Niels Arden Oplev, 2009], Millennium 2: La
Chica que Soñaba con una Cerilla y un Bidón de Gasolina y finalmente Millennium
3: La Reina en el Palacio de las Corrientes de Aire [ambas de Daniel Alfredson,
las dos de 2009] otorgó un soplo de (nunca mejor dicho) aire fresco a un
género manido durante varias décadas, atascado en la morbosidad de asesinatos
como los de Seven [David Fincher, 1995]. Un filón que posteriormente se
aprovechó, creándose títulos como Los Casos del Departamento Q, también
llevados al cine con Nikolaj Lie Kaas y Fares Fares de protagonistas, o series
como Bron (El Puente) [2011], a la que como no, USA, le sacó copia cambiando la
frontera entre Dinamarca y Suecia por la suya propia con la de México. Sin
dejar de lado otras series un tanto previas a Larsson como The Killing [2007],
que tuvo una versión en 2011 hecha en el país de la Gran Bretaña, el thriller
nórdico es un subgénero rico en detalles y matices como en una malsana
atmósfera que, irónicamente, el propio Fincher acabaría sacándole jugo en el
remake de la primera parte de la trilogía de Larsson, al servicio de Daniel
Craig y Rooney Mara. Despiadada y dotada de una crueldad tan grande como el
frío de sus parajes, el crimen en los países más septentrionales del Viejo
Continente se ha convertido, gracias a la fuerza de sus atrocidades, en un
filón que permite crear monstruos en la pequeña y gran pantalla. Unos tan
sórdidos como a la vez irresistibles.
Nº De Serie: NC/TCM/00365. Escrito Por: The Cineman.
Publicado El: Sábado, 24 de diciembre de 2016.
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