Vista En: TVE-1, martes 30 de julio de 2002.
Título Original: Mr. Jones.
Director: Mike Figgis.
Guión: Eric Roth y Michael Cristofer, basado en una
historia original de Eric Roth. Género: Drama.
Música: Maurice Jarré. Fotografía: Juan Ruiz Anchía.
Decorados: Larry Fulton. Vestuario: Florence Fellman.
Productora: Rasar Productions. Presupuesto: ±25.000.000 $.
País: USA. Año: 1993. Duración: 114 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Richard Gere
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Mr. Jones
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Lena Olin
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Dra. Elizabeth ‘Libbie’ Bowen
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Anne Bancroft
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Dra. Catherine Holland
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Tom Irwin
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Dr. Patrick Shaye
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Lauren Tom
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Amanda Chang
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Delroy Lindo
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Howard
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Bruce Altman
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David
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Lisa Malkiewicz
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Susan
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Thomas Kopache
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Sr. Wilson
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Peter Jurasik
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Dr. Rosen
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Anna Maria Horsford
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Jueza Harris
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Kelli Williams
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Kelli
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Mr. Jones es un hombre dinámico dominado por
un trastorno de desorden bipolar, lo que le lleva de periodos de gran euforia a
otros en donde la depresión puede inducirle a ideas suicidas. Arrestado tras un
concierto de música clásica donde se subió al atril para dirigirla, es
entregado a la doctora Bowen, que intentará curar a Jones de su estado
maniaco-depresivo.
Crítica: Extraña mezcla entre drama y comedia que
parece estar hecha por y para un histriónico Richard Gere, en un papel que es
posible hubiera servido mejor a otros actores más dados a la exageración como
Robin Williams o tal vez Al Pacino, pero con el que Gere ofrece una convincente
interpretación de un hombre atrapado por sus explosiones emocionales pero cuyo
pasado queda demasiado en el aire, dejando la película coja, mientras que otros
detalles lastran la película debido a lo imposible y/o forzado de su premisa
(Jones, en plena calle, arremetiendo con un enorme y fugaz beso a una chica que
estaba discutiendo con su novio; su curiosa capacidad para conocer a la gente y
para conseguir empleo, solo para echarlo todo por la borda al segundo
siguiente: la escena haciendo equilibrismos sobre un pequeño madero saliente de
una casa es de cortar la respiración; el romance, que solo sirve para enturbias
sin necesidad unas aguas que no debían ser tocadas: ¿cuando entenderán los de
Hollywood que no todas películas deben depender de eso?). Luminosa en su
fotografía y mínimanente pasable en su banda sonora y vestuario, Lena Olin
ofrece un agradable contrapunto serio a la efusividad de Gere, en una lucha
entre dos voluntades, una adicta a la adrenalina y la otra mucho más dura y
contenida (Jones, hundido y tumbado en una camilla, confesando el necesitar de
sus subidas de euforia; los intentos de Bowen por psicoanalizar a Jones y
entender su problema; Jones de nuevo, compareciendo ante una jueza, solo para
ofrecer una delirante explicación de su numerito en el concierto). Con
evidentes aires de pretenciosidad y de querer abarcar más de lo que puede
morder, Mr. Jones acaba siendo un largometraje que, aunque lo intenta, no
explota debidamente todas sus posibilidades, alzándose como un romance de medio
pelo sin sentido que deja de lado todo lo interesante. Por desgracia.
La Puntilla: Gere genial, Olin genial...y para de contar,
que el resto se va al baúl de “oportunidades perdidas”.
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