Vista En: Cines Marta & María (Avilés), miércoles
23 de enero de 2008.
Título Original: Mr. Brooks.
Director: Bruce A. Evans.
Guión: Bruce A. Evans y Raynold Gideon. Género: Intriga.
Música: Ramin Djawadi. Fotografía: John Lindley.
Decorados: Anne Kuljian. Vestuario: Judianna Makovsky.
Productoras: Metro-Goldwyn-Mayer, Eden Rock Media, Element
Films, Tig Productions y Relativity Media. Presupuesto: ±20.000.000 $.
País: USA. Año: 2007. Duración: 120 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Kevin Costner
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Earl Brooks
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Demi Moore
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Detective Tracy Atwood
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Dane Cook
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Sr. Smith
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William Hurt
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Marshall
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Marg Helgenberger
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Emma Brooks
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Ruben Santiago-Hudson
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Hawkins
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Danielle Panabaker
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Jane Brooks
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Aisha Hinds
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Nancy Hart
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Lindsay Crouse
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Capitana Lister
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Jason Lewis
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Jesse Vialo
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Matt Schulze
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Thorton Meeks
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Yasmine Delawari
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Sunday
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Earl Brooks es un triunfador, empresario y
padre de familia, que oculta un terrible secreto: sufre de adicción por el
asesinato. Después de dos años de parón, Brooks recae y asesina a una pareja,
pero es descubierto de forma accidental por un vecino, un fotógrafo voyeur que
le chantajeará para que le haga un extraño favor: que le enseñe a asesinar al
igual que él.
Crítica: Después de un larguísimo hiato desde su ópera
prima Kuffs, Poli por Casualidad [1992], el guionista de películas como
Starman, el Hombre de las Estrellas [John Carpenter, 1984] y Cuenta Conmigo
[Rob Reiner, 1986] dirige su segunda película en la que Kevin Costner tiene la
ocasión de meterse en un personaje cuya doble moral es un poco dulce
envenenado, pero del que hace un buen trabajo al lado de un siempre invisible
pero fantástico William Hurt, cuya química entre ambos le mete un punto extra
de locura consciente (las charlas entre Brooks y su alter ego Marshall, una
suerte de fantasma/delirio o algo parecido, que parece una versión psicopática
del que hacía Paul Bettany en Una Mente Maravillosa [Ron Howard, 2001]; la
aparición del Sr. Smith, el clásico pirado de vida solitaria con ganas de
vengarse del mundo; la manera en que el guión convierte el asesinato en una
adicción: la reacción de Brooks cuando por fin se deja llevar por sus instintos
es de verdadero orgasmo pero en formato serial killer). Metiendo tramas
secundarias que quedan un tanto mal acabadas o acabadas en el aire como si se
pretendiera ampliar la historia a futuras secuelas, Evans combina la inevitable
investigación policial con un tema familiar interesante tanto por sus
implicaciones como por la actriz que la interpreta (Danielle Panabaker,
preciosa pero inquietante, cuyo inesperada vuelta al hogar paterno da que
pensar; la Detective Atwood, una Demi Moore de rompe y rasga dispuesta a todo
por atrapar al Asesino de la Huella Pulgar; Brooks, asistiendo a una reunión de
los Doce Pasos, diciendo lo justo para que nadie sospeche de su adicción). Sin
olvidar detalles como Marg Helgenberger, que fuera de CSI [2000] sigue teniendo
una presencia imponente, Mr. Brooks es una película interesante, a veces
perversa y genial, pero su cierre no está a la altura de su idea, quedándose
algo lejos del potencial exhibido.
La Puntilla: Amante padre, devoto esposo, exitoso
triunfador...y un asesino despiadado. ¿Ficción?. Me parece que de eso poco. MUY
poco.
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