G25: HORNER, LA FANFARRIA DE LA MARAVILLA
La segunda parte de las
aventuras espaciales de la nave estelar Enterprise, enfrentada al pérfido Khan
Noonien Singh, es el punto seminal de un músico que debuta varios años atrás y
que deja su impronta en películas extrañísimas como unos mutantes medio hombres
medio peces con un apetito excesivo por las chicas humanas o una versión
espacial y desmelenada de todo un clásico del cine del oeste. Hiperactivo hasta
la médula, sus trabajos se acumulan a la velocidad del rayo, desde las segundas
aventuras de una teniente contra una hostil y monstruosa reina alien a la de un
soldado en el planeta Pandora que decide defender este para evitar que los
humanos le hagan lo mismo que a la Tierra, pasando por la aventura de un
capitán soviético en Chicago para pillar a un traficante de drogas que se le
escapó en Moscú, la de un juego que cada tirada se convierte en un peligroso
desafío real para sus jugadores, y hasta la recreación del más famoso
hundimiento de un trasatlántico de la historia del siglo XX. Sutil,
espectacular, a veces tirando de coros angelicales y otras de unas trompetas
que rematan un enorme sentido de la aventura, su sonido es el de un autor con
una rúbrica que busca el preciosismo y el refinamiento en cada partitura
compuesta. Algo que se manifiesta y por todo lo alto en filmes como un aventurero y justiciero vestido de negro con capa y espada que debe entrenar a su relevo, el de un
cometa que amenaza a la humanidad pero, por encima de todo, en la odisea de un
granjero enano por salvar a una niña de la ira de una bruja que la quiere
asesinar para no perder su imperio de terror. James Horner y excelencia musical
son dos términos hechos para ir juntos de la mano, capaz de tocar el corazón,
de aterrorizar y maravillarse gracias a su innata capacidad para componer
melodías que suenan espléndidamente bien. Una fanfarria tan bella y
arrebatadora como la pequeña Elora Donan.
Nº De Serie: NC/TCM/00266. Escrito Por: The Cineman.
Publicado El: Lunes, 24 de octubre de 2016.
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