G25: DEMME, LA FUERZA DEL MAL
A lo largo de unos veinte años,
su trabajo de director de comedias se salda con un éxito discreto y relativo,
en que ni quedaba en el olvido pero tampoco destaca en exceso, aunque historias
como la de una mujer de un mafioso que huye de los asesinos de su marido y
todos van tras ella, o la desventura de dos pícaros perdidos por Nueva York le
canjean la simpatía del público. Pero, al inicio de los 90, su carrera no
despega, si no que más bien se proyecta al infinito a velocidad de vértigo con
la trama de una cadete del FBI que, en un intento por capturar a un asesino,
debe entrevistar a otro para que le ayude con el perfil psicológico. Y cuando
justo después narra la polémica historia de un abogado expulsado por ser
seropositivo que reclama justicia, entonces su nombre pasa a estar en boca de
todos, eclipsando todo lo anterior como si no hubiera existido. En sus
siguientes trabajos se atreve con la historia de una joven negra en la época de
la esclavitud y con un algo fallido remake de una de las mejores películas de
Alfred Hitchcock, comenzando un extraño ocaso que se refuerza con otro remake,
en que un militar aspirante a presidente sometido a un programa de control
mental por parte de una compañía con un interés malvado en tener a un
presidente en el bolsillo. Regresando de nuevo a esa discreción de sus inicios,
una boda que reúne a una familia disfuncional y las desventuras de una cantante
de segunda fila que debe cuidar de su hija neurótica tras ser abandonada por su
novio dan la evidencia de un prestigio pasado al olvido, pero que en su momento
álgido da el mejor retrato posible de la fuerza del mal, sin recurrir ni a
monstruos ni a alienígenas. Jonathan Demme es uno de esos casos típicos de
ascenso y caída, dibujando una suerte de montaña en su trayectoria profesional,
tocando techo cuando un psicópata encarcelado da más miedo que el que Clarice
Sterling intenta capturar.
Nº De Serie: NC/TCM/00277. Escrito Por: The Cineman.
Publicado El: Viernes, 28 de octubre de 2016.
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