Vista En: Canal Hollywood, Jueves 30 de julio de 2015.
Título Original: Star Trek V: The Final Frontier.
Director: William Shatner.
Guión: David Loughery, basado en una historia
original creada por William Shatner, Harve Bennett y David Loughery, basado
también en la serie de televisión Star Trek: La Conquista del Espacio, creada
por Gene Roddenberry y estrenada en 1966. Género: Ciencia Ficción.
Música: Jerry Goldsmith. Fotografía: Andrew Laszlo.
Decorados: John M. Dwyer. Vestuario: John M. Dwyer.
Productora: Paramount Pictures. Presupuesto: ±27.800.000 $.
País: USA. Año: 1989. Duración: 107 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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William Shatner
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James T. Kirk
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Leonard Nimoy
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Spock
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DeForest Kelley
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Dr. Leonard ‘Bones’ McCoy
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James Doohan
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Montgomery Scott
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George Takei
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Hikari Sulu
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Walter Koenig
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Pavel Chekov
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Nichelle Nichols
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Nyota Uhura
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Laurence Luckinbill
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Sybok
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David Warner
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St. John Talbot
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Cynthia Gouw
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Caithlin Dar
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Charles Cooper
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Korrd
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Spice Williams-Crosby
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Vixis
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: La nave Enterprise se obligada a viajar a un
planeta, Nimbus III, para rescatar a unos embajadores apresados por unos
rebeldes. Pero al llegar descubren que todo ha sido un engaño urdido por Sybok,
un vulcano renegado el cual planea robar la Enterprise para atravesar la Gran
Barrera, un campo impenetrable de energía que existe en el centro de la Vía
Láctea.
Crítica: Primer largometraje de la saga dirigida por
el propio William Shatner tras dos décadas como Capitán Kirk, en una aventura
con tintes que parecen querer jugar con la parodia más desvergonzada, pero que
también tiene una buena dosis de drama personal, todo ello mezclado con la
pletórica presencia de un Laurence Luckinbill dispuesto a entrar en la galería
de los villanos más desquiciados de la galaxia (éste, revelando a Kirk la
verdadera misión y quién se la ordenó: la reacción del primero lo dice todo;
varios rebeldes, viendo en el desierto a una bailarina de lo más inesperada;
Kirk, Spock y McCoy, juntos de acampada, unidos como símbolo de una familia que
ellos nunca llegaron a tener). Con un sentido del ritmo sosegado que se guarda
el misterio hasta el final, y la sempiterna excelencia musical de Goldsmith,
imprescindible en la franquicia, la película se mueve por terrenos a veces
farragosos, dejando un montón de cabos sueltos por resolver, como también logra
otras escenas más trabajadas y mejor conseguidas, creando un equilibrio difícil
entre sus partes (Sybok, haciendo a McCoy se enfrente a los fantasmas del
pasado: su clímax, impresionante en cuanto a los efectos especiales pero
faltándole un montón de respuestas; la Enterprise, en un estado cercano al
ruinoso: ¿no se suponía, al final de Star Trek IV: Misión, Salvar la Tierra
[Leonard Nimoy, 1986], que estaba en perfecto estado para viajar?).
Añadiendo una dosis extra de peligro y una referencia que ya insinúa las claves
de su trama, Star Trek V: La Última Frontera es un título que flojea en sus
elementos más vitales, limitando sus aspiraciones para quedarse como un
capricho personal de Shatner, con alguna virtud pero muchos defectos (el don de
Sybok: ¿cómo puede hacerlo?; éste, hablando de Sha-Ka-Ree; Scott, un bufón de
lo más innecesario). Una película deficiente, que intenta pero no logra salir a
su propia irrelevancia.
La Puntilla: Dan igual los siglos que pasen, siempre habrá
algún cretino que se crea que Dios le recompensará si prueba su existencia.
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