Vista En: Tele 5, domingo 13 de agosto de 2000.
Título Original: To Sir, with Love.
Director: James Clavell.
Guión: James Clavell, basado en la novela homónima
autobiografica To Sir, with Love, de E.R. Braithwaite, publicada en 1959. Género: Drama.
Música: Ron Grainer. Fotografía: Paul Beeson.
Decorados: Ian Whittaker. Vestuario: John Wilson Apperson.
Productoras: Columbia Pictures Corporation y Columbia
British Productions.
Presupuesto: ±640.000 $.
País: Reino Unido. Año: 1967. Duración: 105 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Sidney Poitier
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Mark Thackeray
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Christian Roberts
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Bert Denham
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Judy Geeson
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Pamela Dare
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Suzy Kendall
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Gillian Blanchard
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Lulu
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Barbara ‘Babs’ Begg
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Ann Bell
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Sra. Dare
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Geoffrey Bayldon
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Theo Weston
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Faith Brook
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Grace Evans
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Patricia Routledge
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Clinty Clintridge
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Christopher Chittell
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Potter
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Adrienne Posta
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Moira Joseph
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Edward Burnham
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Florian
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Mark Thackeray es un ingeniero en búsqueda de
un importante empleo en una fábrica con la que ganarse la vida. Logrando un
puesto como profesor mientras tanto, se encuentra ante una situación que le
desborda al descubrir que la clase que le ha tocado está conformada por unos
jóvenes de un fuerte carácter rebelde y callejero que pasan de las normas.
Crítica: Apasionante y en extremo popera revisión del
mundo del maestro y la enseñanza de manos de un imponente y carismático Sidney
Poitier el cual se convierte en un imán que atrapa las atención en el contraste
que hace con el resto de sus jóvenes partenaires, en lo que se antoja como una
mirada en clave más británica y con aroma a los Beatles de Semilla de Maldad
[Richard Brooks, 1995] (el vestuario de estudiantes como Babs o Dare, hechos
con idea de ser lo más fashion posible; los primeros intentos de Thackeray de
conocer a sus alumnos, encontrándose con algo que consigue crispar sus nervios:
lo de la papelera quemada con algo dentro sirve para remarcarlo notablemente;
el evidente interés amistoso/¿algo más? de la Srta. Blanchard hacia Thackeray,
tanto por su elegancia y aplomo como por sus métodos; el cambio de actitud de
los estudiantes, lento y progresivo pero genial). Con secuencias al estilo de
la serie Los Vengadores [1961] y una serie de secundarios y momentos con algo
de humor para agilizar el drama, Rebelión en las Aulas es una verdadera
maravilla tanto por la puesta en escena como por la planificación en si, que
lanza más de una crítica solapada hacia una profesión harta difícil (la salida
al museo, ejecutado como si fuese un videoclip de los cuatro de Liverpool: la
cara de Thackeray, dándose cuenta de que el color de su piel es un problema
para atender cierta tarea: no se dice abiertamente, pero ni falta que hace; la
manera en que tanto el director como otro profesor desdeñan a los alumnos, uno
por rendición y el otro por simple desidia). Tratando más de un tema a la vez y
haciéndolo con un justo equilibro tan emotivo como su banda sonora y
fotografía, el director de Cinco Puertas al Infierno [1959] y Camina como un
Dragón [1960] consigue una tercera película que derrocha talento. El pulso
permanente de Thackeray contra Denham es la confirmación de ello.
La Puntilla: ¿Si los profesores y hasta el propio director
se rinden con ellos, qué esperar de algunos chicos salvo que se hagan
delincuentes?.
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