Vista En: Casa de la Cultura (Avilés), viernes 30 de
diciembre de 2016.
Título Original: Robot Overlords.
Director: Jon Wright.
Guión: Jon Wright y Mark Stay. Género: Ciencia Ficción.
Música: Christian Henson. Fotografía: Fraser Taggart.
Decorados: Sally Black. Vestuario: Hazel Webb-Crozier.
Productoras: Pinewood Studios, British Film Company,
British Film Institute, Northern Ireland Screen, Tempo Productions Limited y
Umbra Telegraph Pictures. Presupuesto: ±21.000.000 $.
Países: Reino Unido y Canadá. Año: 2014. Duración: 90 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Ben Kingsley
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Robin Smythe
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Gillian Anderson
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Kate
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Callan McAuliffe
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Sean Flynn
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Ella Hunt
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Alexandra
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James Tarpey
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Nathan
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Milo Parker
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Connor
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Craig Garner
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Mediador 452
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Steven Mackintosh
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Danny
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Tamer Hassan
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Wayne
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Geraldine James
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Monique
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Roy Hudd
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‘Código Morse’ Martin
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David McSavage
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Relojero/Donald
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Después que unos robots alienígenas
invadiesen y dominasen la Tierra, la raza humana se ha visto forzada a ser
prisionera de sus hogares. Un grupo de chicos, descubriendo de forma accidental
como anular los implantes de sus cabezas, logran salir sin ser detectados para
buscar al padre de uno de ellos, desaparecido tras ser detenido por el jefe de
zona, Robin Smythe.
Crítica: Curiosa y por momentos interesante propuesta
de ciencia ficción de clara serie B con tintes que casi la hacen un capítulo
perdido de Doctor Who [2005], teniendo a una grande en materia de ciencia
ficción como la eterna Dana Scully de Expediente X [1993], y Ben Kingsley, en
que despojados de sus respectivos y habituales Laura Palacios y Mario Gas como
voces españolas, el esfuerzo de sus reemplazos cae en saco roto (Smythe,
enésimo crápula capaz de aliarse con el enemigo solo para conseguir una
posición de poder frente a los demás: un villano de esos hecho para
detestables; el instante en que Sean y los demás descubren como apagar los
implantes, divertido en lo accidental que resulta y por el hecho de tener que
repetirlo cada 13 horas; el diseño de los robots, con un acabado de efectos
especiales obviamente limitado por su falta de medios, pero con cierto encanto).
Guardándose muchos paralelismos con Oblivion [Joseph Kosinski, 2013] y con unos
diálogos que realmente son de lo mejor de la película, Robots: La Invasión es
una muy lejana revisión de Campo de Batalla: La Tierra [Roger Christian, 2000],
pero mejor afinada que ésta en cuanto a personajes y situaciones (Smythe,
cambiándole el implante de Sean de blanco a negro: un momento crucial cuyas
implicaciones evocan al John Murdoch de Dark City [Alex Proyas, 1998]; las
motivaciones de los robots para estar en la Tierra, descritas sucintamente:
pensadas en frío, resultan de lo más fascinantes; Sean y compañía llegando a un
monumento megalítico, en busca de una clave). Rodada en el Norte de Irlanda y
la Isla de Man, sacando partido a sus paisajes y panorámicas, Robots: La
Invasión es una película muy consciente de sus limitaciones que, por eso mismo,
sigue los esquemas de su género con tranquilidad, creando una historia pequeña
con mucha enjundia. Un trabajo menor, cuyo contenido es para valorarlo en su
justa medida.
La Puntilla: Robots alienígenas buscando algo que los
humanos tenemos pero ellos no. Solo por eso, merece la pena apreciar más dicho
detalle.
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