Vista En: Youtube, viernes 12 de mayo de 2017.
Título Original: Rewind.
Director: Jack Bender.
Guión: Justin Marks. Género: Ciencia Ficción.
Música: Michael Beach y Jonathan Ortega. Fotografía: Stephen McNutt.
Decorados: [Desconocido]. Vestuario: Damion Saliani.
Productoras: BermanBraun y Universal Cable Productions.
Presupuesto: [Desconocido].
País: USA. Año: 2013. Duración: 76 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Shane McRae
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Shaun Knox
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Jennifer Ferrin
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Dr. Lyndsay Bryce
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Robbie Jones
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Danny
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Keon Alexander
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Charlie
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Keisha Castle-Hughes
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Priya
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Jeff Fahey
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Ellis
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Matthew Bennett
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John Malcolm
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Paulino Nunes
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General Randall Webb
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Melanie Scrofano
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Jessica Knox
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David Cronenberg
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Benjamin Rourke
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James Downing
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Jefe de Estado
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Kenneth Welsh
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Presidente
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Shaun Knox es un agente del FBI que fracasó
en su intento de detener el ataque terrorista de Benjamin Rourke, un científico
cuya bomba arrasó Nueva York y mató a 9 millones de personas. Un mes después,
Knox es reclutado para un experimento secreto por el cual podría viajar en el
tiempo con un equipo y de ese modo evitar que Nueva York sea arrasado.
Crítica: Curtido director en series de TV y películas
para TV con una escasa repercusión dentro del cine, con excepción de Muñeco
Diabólico 3 [1991] o de Lone Justice 2 [1995], Bender firma el episodio piloto
de una fallida serie de televisión nunca realizada, cuya temática es una mezcla
de las series El Túnel del Tiempo [1964] con pizcas de Siete Días [1998], que
hace aguas por su más que evidente pátina como producción de serie Z, notándose
especialmente en la elección de su reparto protagonista (Shane McRae, haciendo
las veces del Jonathan LaPaglia de la serie de 1998, pero a años luz de
cualquier atisbo de carisma o credibilidad; John Malcolm, el típico militar
destinado a caer mal por méritos propios, especial por un final con mucho a
sugerir en donde todo queda a la imaginación y a infinitas especulaciones; Jeff
Fahey, o la enésima revisión del Q de James Bond aunque mucho menos ingenioso
que el Desmond Llewellyn de aquella). Incluso a pesar de un prólogo potente en
el que hasta el director David Cronenberg se permite un pequeño papel, Rewind
no logra pasar el criterio de selección para ser expandido más allá de una
película que tiene un enorme defecto por su entramado pero que obtiene un punto
a su favor por el debate moralista (sus primeros 40 minutos, un largo trailer
sobre presentaciones de personajes y situaciones para luego ir al grano:
demasiado lento; Knox, planteándole a los demás la duda de si es moralmente
aceptable matar a una sola persona para salvar a nueve millones: de lo poco que
sí está inspirado; el asunto del acelerador de partículas como puerta de viaje
en el tiempo, socorrido y predecible para marcar las reglas y los riesgos de un
viaje al pasado: aceptable por los
pelos). Un trabajo potente en el guión arruinado por los actores y su forma de
abordar a los personajes, dando fe de que una o dos elecciones desafortunadas
pueden echarlo todo por la borda.
La Puntilla: Lo malo de un final abierto es cuando sabes
que nunca va a ser explicado, y que la duda sobre él jamás dejará de
perseguirte.
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