Robin Hood: Príncipe de los Ladrones [1991]

 Publicado El: Miércoles, 30-Sep-2015. Nº De Serie: C25/TCM/0000180.
 Vista En: La Sexta, domingo 14 de julio de 2013.

 Título Original: Robin Hood: Prince of Thieves.

 Director: Kevin Reynolds.

 Guión: Pen Densham y John Watson. Género: Aventuras.

 Música: Michael Kamen. Fotografía: Douglas Milsone.

 Decorados: Peter Young. Vestuario: John Bloomfield.
 Productoras: Warner Bros. y Morgan Creek Productions.
 Presupuesto: ±48.000.000 $.

 País: USA. Año: 1991. Duración: 143 minutos. Color.

Reparto:	Personajes:
Kevin Costner	Robin Hood
Morgan Freeman	Azeem
Mary Elizabeth Mastrantonio	Marian Dubois
Christian Slater	Will Scarlett
Alan Rickman	Sheriff George de Nottingham
Geraldine McEwan	Mortianna
Michael McShane	Fraile Tuck
Brian Blessed	Lord Locksley
Michael Wincott	Guy de Gisborne
Nick Brimble	Little John
Soo Drouet	Fanny
Daniel Newman	Wulf

 (Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)

 Argumento: Seis años después de luchar en Jerusalén durante Las Cruzadas, Robin de Locksley vuelve a Inglaterra para descubrir que el tiránico Sheriff de Nottingham ha asesinado a su padre y robado sus tierras. tierras. Convertido por éste en prófugo, en su huída conoce a unos ladrones que se refugian en un bosque, haciendo de todos ellos su particular ejército para derrocarle.

 Crítica: Tras su impresionante debut como realizador con Bailando con Lobos [1990], Kevin Costner se calza las mallas del legendario héroe medieval en un papel que le queda como anillo al dedo gracias a su carisma y socarronería (la visita a Lady Marian; Azeem, pidiendo a Robin hacia donde está el sol). Una producción en donde, gracias a un par de villanos de altos vuelos y una banda sonora altamente disfrutable de Michael Kamen, el mismo de Los Inmortales [Russell Mulcahy, 1986], se mantiene un ritmo constante en el que comedia y espectáculo están asegurados (Alan Rickman, un villano memorable y cómico al tiempo; el encuentro con Tuck, un fraile muy peculiar; Marian, intentando desviar la atención de Robin al disparar éste una flecha). Con un ojo preciso para la épica y las historias un tanto más íntimas, Kevin Reynolds maneja con suficiente acierto ambos conceptos para, partiendo de algo nimio (el deseo de Robin de volver junto a su padre) elevar las expectativas, en un relato en donde las sorpresas arrojan resultados de lo más variopintos (el rifirrafe entre Robin y Will Scarlett, un Christian Slater algo exasperante por momentos; la divertida charla entre Duncan y Azeem; Robin, utilizando por primera vez un catalejo: la réplica de Azeem es ideal). Aunque carga con el problema de una duración un tanto alargada fruto de la ambición por abarcar demasiado en su guión, que incluso añade algunos elementos fantásticos (Mortianna y sus artes brujeriles: la química McEwan-Rickman es tremenda), y que también termina por tener cierto alegato anti-sistema (el discurso de Robin en el bosque; sus primeras incursiones contra los soldados de Nottingham). Con una maravillosa fotografía silvestre y una estupenda ambientación, Robin Hood: Príncipe de los Ladrones es una aventura en el sentido más clásico del término: romance, tragedia, comedia, acción y muchísimo más. Un puntazo de película. 

 La Puntilla: “Asesinas a mi padre, robas mis tierras y ahora quieres quitarme la novia: George, ¿nunca te han dicho que eres un poquito envidioso?”.

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