Vista En: Calle 13, domingo 7 de septiembre de 2003.
Título Original: The Ultimate Warrior.
Director: Robert Clouse.
Guión: Robert Clouse. Género: Ciencia Ficción.
Música: Gil Meller. Fotografía: Gerald Hirschfeld.
Decorados: William F. Calvert. Vestuario: Ann McCarthy.
Productora: Warner Bros. Presupuesto: ±800.000 $.
País: USA. Año: 1975. Duración: 94 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Yul Brynner
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Carson
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Max von Sydow
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El Barón
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Joanna Miles
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Melinda
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William Smith
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Carrot
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Richard Kelton
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Cal
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Stephen McHattie
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Robert
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Darrell Zwerling
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Silas
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Lane Bradbury
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Barrie
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Nate Esformes
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Garon
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Mel Novak
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Lippert
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Mickey Caruso
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B. Harkness
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Gary Johnson
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L. Harkness
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: En el año 2012, un holocausto nuclear ha
desvastado el planeta Tierra. En Nueva York, los escasos supervivientes se
dividen en dos facciones, los pacíficos dirigidos por El Barón y los más
belicosos liderados por Carrot. Cuando El Barón logra unas semillas que pueden
germinar, un ranger solitario de nombre Carson es asignado para proteger a El Barón
y a sus semillas.
Crítica: Clouse, autor de Más Oscuro que el Ámbar
[1970] y la emblemática Operación Dragón [1973], se mete en terrenos de ciencia
ficción para crear una angustiosa distopía situada en un mundo al que parece el
tiempo le pisa los talones, situando su historia en una Nueva York turbia y
desangelada, tan violenta como a la vez desazonadora en una fotografía y una
ambientación en donde los bajos instintos están a la orden del día (El Barón,
un tremendo Max von Sydow, eterno Lancaster Merrin en El Exorcista [William
Friedkin, 1973], un hombre en busca de rehacer una sociedad y un mundo
moribundo; Carrot, una Némesis de El Barón para el que la brutalidad y la agresividad
son el pan de cada día: su interrogatorio a un hombre de El Barón o su saludo a
Carson desde la distancia lo dejan más que clarito). Poniéndose en las
antípodas de otras títulos del estilo como Edicto Siglo XXI: Prohibido Tener
Hijos [Michael Campus, 1972] y Cuando el Destino nos Alcance [Richard
Fleischer, 1973], la película ofrece un esbozo más que desagradable de lo que
pasaría en caso de un holocausto nuclear, reduciendo miles de millones de
humanos a un puñado de salvajes dispuestos a todo para sobrevivir (las calles y
edificios de Nueva York, ausentes de gente, dominadas por el polvo y la
suciedad en lo imposible de su mantenimiento: nada que ver con Campus y
Fleischer; un hombre de El Barón, linchado por los demás acusado de quedarse
comida: su destino es de lo más desalentador; los hombres de Carrot, atacando
el huerto de El Barón, provocando una reacción inesperada y terrible para un
personaje clave). Una cinta impresionante como un Yul Brynner que chorrea
virilidad y hombría en cada escena donde sale, dueño de un carisma que se
ajusta como un guante a un personaje atrapado por una causa mucho mayor que él.
Nueva York, Año 2012 es un buen film sobre un mal futuro. Uno de esos que mejor
no vivir.
La Puntilla: Si ver un mal futuro ayuda a evitarlo, ojalá
películas como ésta jamás lleguen a caer en el olvido. Nunca se sabe.
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