Publicado El: Lunes, 4-Jul-2016. Nº De Serie: C25/TCM/0000636.
Vista En: Cines Cinebox (Corvera), viernes 30 de marzo
de 2012.
Título Original: Wrath of the Titans.
Director: Jonathan Liebesman.
Guión: Dan Mazeau y David Leslie Johnson, basado en
una historia original de Greg Berlanti, David Leslie Johnson y Dan Mazeau,
inspirado en el libreto original de 1981 de Beverley Cross. Género: Fantástico.
Música: Javier Navarrete. Fotografía: Ben Davis.
Decorados: Lee Sandales. Vestuario: Jany Temime.
Productoras: Warner Bros., Legendary Pictures, Cott
Productions, Furia de Titanes II, A.I.E. y Thunder Road Pictures. Presupuesto: ±150.000.000 $.
Países: USA y España. Año: 2012. Duración: 99 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Sam Worthington
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Perseo
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Liam Neeson
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Zeus
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Ralph Fiennes
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Hades
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Edgar Ramirez
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Ares
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Toby Kebbell
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Agenor
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Rosamund Pike
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Andrómeda
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Bill Nighy
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Hefesto
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Danny Huston
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Poseidón
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John Bell
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Helio
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Lily James
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Korrina
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Freddy Drabbl
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Apolo
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Kathryn Carpenter
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Atenea
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Varios años después de derrotar al Kraken,
Perseo vive con su hijo al margen del mundo hasta que descubre que Zeus ha sido
apresado por Hades, drenando su energía para resucitar a su padre, el titán
Cronos. Con la ayuda de la reina Andrómeda y Agenor, hijo de Poseidón,
intentarán llegar al reino de los muertos para liberar a Zeus antes de que
Cronos resucite.
Crítica: Quien debutase como director con En la
Oscuridad [2003] y dirigiese Invasión a la Tierra [2011] sustituye a Louis
Leterrier en un film de aventuras visualmente impresionante en muchos de sus
pasajes, pero que persiste en la misma ausencia de calidad interpretativa,
dejando que ésta se desvanezca en pos de una acción imparable y unos set-pieces
hechos para dejar con la boca abierta y poco más (el instante en que se revela
la apariencia de Cronos: ¿en serio “eso” pudo engendrar a Zeus y el resto de
dioses?; Agenor, un semidios pagado de si mismo cuya pose de petulancia es
insoportable; Rosamund Pike, reemplazando a Alexa Davalos, situándose en los
mismos niveles de belleza y falta de dramatismo y/o verosimilitud). Mediante un
guión caracterizado por una serie de errores que van y vienen sin que importe
mucho, Liebesman se limita a dejar que su reparto pongan su mejor cara, con
alguno robando plano y atención de forma descarada (Bill Nighy, merendándose a
todos sin piedad, tan desaprovechado como un Danny Huston meramente anecdótico;
el inicio, con un taciturno Perseo ante la tumba de Io: ¿no se suponía que la
chica era inmortal?; Zeus y Hades, copiando todo de Luke Skywalker y Darth
Vader en Star Wars, Episodio VI: El Retorno del Jedi [Richard Marquand, 1983]).
En un continuo buscar el más difícil todavía, el juego de acción y efectos
especiales resulta deslumbrante, siendo el único aliciente en una producción
que parece haber sido hecha a toda prisa (el inframundo, un remiendo de Cube
[Vincenzo Natali, 1997] pero a una escala inconcebible; los demonios del
Tártaro, de lo más variado en aspecto y niveles de letalidad; Ares, un dios de
la guerra muy aburrido en su eterno enfado). Ira de Titanes es, más que una
segunda parte, la evidencia de un cine palomitero con poca gracia y mucha
desgracia, ideal para verlo, disfrutarlo, y luego enviarlo lejos. Al
inframundo, a ser posible.
La Puntilla: Guiones chapuceros y actores mal usados. El
día menos pensado harán pelis solo con efectos especiales. Y al que no le
guste, que le den.
Mi
Valoración
★★★★★
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