Vista En: Cines Los Prados (Oviedo), sábado 16 de
septiembre de 2017.
Título Original: Alibi.Com.
Director: Philippe Lacheau.
Guión: Philippe Lacheau, Julien Arruti y Pierre
Dudan. Género: Comedia.
Música: Maxime Desprez y Michaël Tordjman. Fotografía: Dominique Colin.
Decorados: Camille Bougon-Pigneul. Vestuario: Eve-Marie Arnault.
Productoras: Fechner Films, TF1 Droits Audiovisuels,
StudioCanal, TF1 Films Production, CN5 Productions, Palatine Étoile 14, Canal+,
Ciné+, TF1 y TMC.
Presupuesto: ±7.546.570 € (±7.954.839 $).
País: Francia. Año: 2017. Duración: 90 minutos. Color.
Reparto:
|
Personajes:
|
Philippe Lacheau
|
Grégory Van Huffel
|
Élodie Fontan
|
Florence ‘Flo’ Martin
|
Julien Arruti
|
Augustin
|
Tarek Boudali
|
Mehdi
|
Didier Bourdon
|
Gérard Martin/Jean-Claude
|
Nathalie Baye
|
Mme Martin
|
Nawell Madani
|
Cynthia Bellini
|
Medi Sadoun
|
Garcia, el gitano
|
Vincent Desagnat
|
Romain
|
Alice Dufour
|
Clara
|
Philippe Duquesne
|
Maurice
|
Philippe Lacheau
|
Grégory Van Huffel
|
(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Grégory Van Fuel es un joven que posee un
negocio cuya misión es crear coartadas perfectas para los maridos que engañan a
sus esposas. Su estilo de vida bohemio y feliz se altera con la llegada de la
hermosa Florence, de la que se enamora y a la que oculta su trabajo, sobretodo
al descubrir que el papel de Flo y su futuro suegro es también uno de sus
clientes.
Crítica: Desternillante comedia en la que Lacheau
ejerce de actor y director al mismo tiempo, en una trama muy libremente
inspirada en el escándalo de la web Ashley Madison, y que se convierte en un
circo de tres pistas a base de errores y secuencias a caballo de lo ridículo y
lo histriónico, reservándose un necesario hueco para el romance y en menor
medida para el drama (el inicio, apenas cinco minutos para explicar la empresa
de Van Huffel, o como coger la infidelidad y convertirlo en un arma de risión
masiva; el terror en las caras de éste y de Gérard al reencontrarse, teniendo
que disimular para evitar ser descubiertos; el perro de Flo, que acumula risas
a base de unas astracanadas a cada cual más increíble: al can le pasa de todo).
Loquísima incluso cuando parece estar más calmada en el guión, el autor de las
dos entregas de Se nos Fue de las Manos [2014 y 2015] da en el blanco con un ritmo
endiablado y una serie de tramas secundarias que dejan siempre con la miel en
los labios, en la duda de saber si al final la red de mentiras estallará en la
cara de los protas (Bellini, el lío de Gérard, una aspirante a cantante
demasiado aficionada a la buena vida; Mehdi, conduciendo la furgoneta en la que
va junto a Augustin y Van Huffel, revelando sin querer el motivo por el que los
trabajos le duran poco: un puntazo de los gordos; la partida de bolos, seguida
por una apuesta que se reserva un instante de imitación a ciervos ligera de
ropa que desata la carcajada incluso a las piedras). Un cúmulo de barbaridades,
precioso en la fotografía como estupenda en la banda sonora, guiños a la saga
Star Wars y a Contacto Sangriento [Newt Arnold, 1988] avalan un film cuyo final
es un tanto predecible, pero que no desmerece el resto del conjunto (Gérard y
Mme, de baile; Bellini y Van Huffel, encontrándose con unos gitanos), y que
hace de su escueta hora y media un generoso festival de humor y cachondeo.
La Puntilla: El hombre más mentiroso del mundo con la
mujer más honesta del mundo. Es decir: una bomba de relojería a punto de
estallar.
Mi
Valoración
★★★★★
No hay comentarios:
Publicar un comentario